El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que The New York Times y el periódico El País aseguran que su gobierno está en contra de las mujeres, en el contexto del Día Internacional de la Mujer que se conmemora este 8 de marzo.
En la conferencia matutina del pasado miércoles 3 de marzo, el mandatario federal afirmó que en Madrid, España, sí fueron limitadas las marchas por esta fecha.
“Pero nada más les recuerdo a los de El País que allá en Madrid prohibieron las manifestaciones por el día de las mujeres o no pueden salir a la calle más de 500 mujeres; aquí no, aquí hay libertades plenas. Allá sólo van a permitir que salgan 500 mujeres, por la pandemia; aquí no, aquí es prohibido prohibir, se garantizan los derechos de manifestación, de expresión”.
El Ejecutivo Federal solicitó a las mujeres que vayan a manifestarse ese día a no dañar comercios, monumentos ni agredir a las personas.
“La única cosa, aprovechando, es que las manifestaciones sean pacíficas, porque también si hay violencia pues es una contradicción. ¿Cómo se lucha en contra de la violencia y se manifiestan de manera violenta? Eso lo considero contradictorio, pero se respeta a todos, y a todas las mujeres, no hay prohibición”.
“Nada más como recomendación, que sean manifestaciones pacíficas, que no se dañe a establecimientos comerciales, que no se afecten monumentos públicos y mucho menos que se agreda a otras personas, y que también haya cuidado para que no vayan a dañarse de los mismos manifestantes, mujeres u hombres, porque que la vez pasada tiraron bombas”.
“A veces hasta se afecta a quienes van a manifestarse y a protestar legítimamente, entonces, que se cuiden, Y a gritar y a corear y con todo, y con libertad, pero sin violencia. Es una recomendación, cada quien debe ser responsable de sus actos”, así lo expresó en su diálogo con los medios de comunicación.
El Día Internacional de la Mujer, también conocido tras la oleada feminista como #8M, se conmemoró por primera vez en Estados Unidos el 28 de febrero 1909, luego de que se convocó una huelga de trabajadoras textiles contra las condiciones laborales en Nueva York en 1908.