Juan Gabriel vivió muchas situaciones en su juventud en Juárez, pero a los 16 años su vida iba a tener un cambio drástico, ya que recibiría su primera oportunidad arriba de un escenario. En aquella ocasión Alberto Aguilera Valadez se presentaría ante la gente de un bar bajo el nombre de Adán Luna, el resto es historia.
El Noa Noa, más allá de ser una de las canciones más emblemáticas, fue un bar y salón de baile que le tenía una puerta abierta a Juan Gabriel para cambiar su vida por completo. “Meche”, fue la mujer que arriesgó todo para que el cantante tuviera su primera oportunidad arriba de un escenario, ya que lo iba a meter a un bar siendo menor de edad.
En el ya lejano 1966, Adán Luna o mejor dicho Juan Gabriel se representaba ante un público para cantar uno de los grandes temas de Armando Manzanero, “Adoro”, para dar a conocer su talento y ganarse poco a poco el corazón de la gente que estaba en ese bar que a la postre recibiría un agradecimiento de cantante al inmortalizarlo en el álbum de “Recuerdos” en 1980, cuando le dedicó una de las canciones más escuchadas del artista.
Después de la canción se volvió en uno de los lugares más visitados de la ciudad, en parte porque en el mismo año en el que saló el sencillo, Gonzalo Martínez se encargaría de dirigir la película “El Noa Noa”, donde la música era proporcionada por Juanga. Después de más de más de 60 de llevar alegría y alcohol a la gente de Juárez.
Lamentablemente para los fans de Juan Gabriel, la historia terminó al poco tiempo de que saliera la canción, esto debido a que el local se incendió y fue imposible salvarlo, por lo que ya no podían acudir a ver el lugar que le diera vida a uno de los mejores cantantes y compositores de todos los tiempos de México.
Según los reportes, el inmueble tenía muchos daños debido al incendio y fue imposible salvar todos los recuerdos, fotos y grandes momentos que estaban enmarcados dentro de un inmueble que tenía más de 74 años de vida. Los bomberos fueron los que determinaron que lo mejor era demolerlo, pero el dueño decidió ´restarlo a un grupo religioso que brindaba apoyo de rehabilitación a personas adictas.
Para 2007 todo terminó por completo, ya que el propietario decidiría venderlo a Juan Francisco Hinojosa, el dueño de una óptica, para que terminara siendo un estacionamiento sobre Av. Juárez.
Hay un nuevo Noa Noa
Para 2015 las autoridades de Juárez determinaron que se debía construir un nuevo salón, esto para generar turismo en la ciudad y para que los fans de la música del Divo de Juárez pudieran tener un recuerdo del lugar que le dio la primera oportunidad a Adán Luna en el ya lejano 1966. La nueva construcción tiene un mural en memoria a Juan Gabriel.