Con el afán de no revelar la ubicación de las casas de seguridad, las organizaciones criminales han optado por modificar la forma de eliminar a sus contrincantes, aplicando torniquetes o degollando a sus víctimas, expresó ayer el fiscal César Augusto Peniche Espejel.
Agregó que dicho fenómeno se ha hecho más visible en las últimas semanas, al menos en la capital del estado.
Detalló que cada uno de estos hechos está siendo investigado y la mayoría de ellos estarían relacionados con el crimen organizado, de acuerdo con las primeras investigaciones que se han realizado.
En lo que va del presente mes, de acuerdo con reportes periodísticos, en la ciudad han sido asesinadas al menos 21 personas, y muchas de las víctimas presentan características similares, en las que se establece que la causa de muerte fue por estrangulamiento, y en otras a que fueron degolladas.
Estas conductas, de acuerdo con el fiscal César Peniche, obedecen a que las organizaciones criminales en su afán de pasar inadvertidas y no revelar la ubicación de casas de seguridad a las que trasladan a sus víctimas luego de ser “levantadas”, optan por asesinarlos de esta manera, pues al hacerlo con armas de fuego, las detonaciones podrían delatarlos.
Así mismo, una vez que le quitan la vida a la víctima optan por “encobijarla” y dejarlas abandonas en zonas despobladas en los extremos de la ciudad, ya sea al norte o al sur por la zona de Carrizalillo.
César Peniche detalló que la mayor parte de estos asesinatos están relacionados con el crimen organizado y se investiga el entorno de las víctimas.