Brasil y México se citaron en las semis del fútbol masculino de los Juegos Olímpicos de Japón, casi una década después de la final que ganó el Tri en la justa de Londres 2012.
La Verdeamarela debió sudar más de la cuenta ante un porfiado Egipto para derrotarlo 1-0 con un gol del atacante Matheus Cunha en la primera mitad, mientras que México pasó la aplanadora poco después sobre Corea del Sur, al vencerla por 6-3, en lo que fue su tercera goleada en el torneo. Antes propinó palizas a Francia y Sudáfrica en la ronda preliminar.
España se instaló en esa instancia al doblegar 5-2 a Costa de Marfil después de estar a punto de naufragar, abajo en el marcador 2-1 en el primer minuto de reposición del complemento. El partido se fue a un alargue, en que la Roja ibérica fue más contundente para sacar el resultado.
España chocará contra el martes contra Japón, que derrotó en tanda de penales 4-2 a Nueva Zelanda después que el tiempo reglamentario y un alargue terminaron sin goles.
Con planteles juveniles y uno que otro curtido veterano, como el lateral brasileño Dani Alves o el arquero mexicano Guillermo Ochoa, el fútbol olímpico no tendrá la misma alcurnia de la Copa América o el Campeonato Europeo. Pero el oro de los Juegos de Tokio no deja ser un laurel muy preciado.
En Yokohama, donde Brasil logró el pentacampeonato mundial en 2002, México se paseó ante una Corea del Sur que venía como el equipo más goleador en la ronda preliminar. Dobletes de Henry Martin y Sebastián Cordova, más los aportes de Luis Romo y Eduardo Aguirre, con un tanto cada uno, encaminaron la paliza mexicana.
Los goles coreanos fueron de Donnggyeong Lee, a los 20 y 51, y Uijo Hwang a los 91.
De inmediato, los mexicanos quedaron pensando en los brasileños, a los que ganaron 2-1 para alzarse con su histórico oro en Londres, el título más grande logrado por el Tri en una competencia internacional.
“Va a ser un partido siempre difícil, siempre son ellos los favoritos, los candidatos, pero vamos a jugar nuestro partido, vamos a pelearlo, a trabajarlo y a competirlo, veremos qué pasa”, declaró el capitán Ochoa.
Brasil busca revalidar el oro que ganó con Neymar en Río 2016. El astro del Paris Saint-Germain no fue convocado para Tokio.
Egipto se va a casa después de sortea un grupo de primera ronda ganado por España y en el que quedó eliminada la bicampeona olímpica Argentina. El equipo egipcio, que no pudo contar en Japón con su astro Mohamed Salah, se fue con uno de los arcos menos vencido al recibir apenas dos goles en cuatro partidos.
Gracias a un triplete del suplente Rafa Mir, España se salvó de un susto al final del encuentro ante los marfileños. Lo del atacante del Wolverhampton Wanderers inglés fue salvador. Entró en el complemento y metió el tanto con el que empató el partido 2-2 en el tercer minuto de reposición, para mandar el choque a tiempo extra.
Mikel Oyarzabal, de penal, puso arriba a España a los 98 minutos y luego Mir sentenció con sus dos dianas postreras a los 117 y 120.
La Roja, que llegó a Japón con seis de los jugadores que accedieron a las semifinales del pasado Campeonato Europeo, se complicó de entrada, al encajar un temprano gol del marfileño Eric Bailly a los tres minutos. Dani Olmo lo empató a los 30.
Costa de Marfil volvió a adelantarse en el primer minuto de los descuentos del segundo tiempo mediante el gol de Max Gradel, lo que parecía un golpazo del que no se repondría España a esas alturas y después de dominar y generar las mayores ocasiones de gol a lo largo del partido.
“Sólo por situaciones de mala suerte ha impedido que el partido terminara antes de la prórroga”, consideró el entrenador español Luis de la Fuente. Valoró, empero, que el encuentro se fuese a un alargue porque permitió que jugadores como Mir descollaran en momentos clave.
“Los protagonistas son hoy los jugadores, este hombre especialmente”, dijo de la Fuente, en referencia a Mir que tenía a su lado en la conferencia de prensa.
La Roja ibérica busca su segundo oro en el fútbol olímpico masculino, tras el ganado en Barcelona 1992.
con información de AP