De acuerdo a la Comisión Nacional de Búsqueda, San Luis Potosí ocupa el séptimo lugar a nivel nacional en lugares de exterminio o fosas clandestinas con 67 acciones donde en 42 lugares se han encontrado personas sin vida o restos humanos, destaca el ejido de Matanzas, en el municipio de Moctezuma, con 55 hallazgos ocupa el tercer lugar en el país, debajo de Iguala, Guerrero, y Mazatlán, Sinaloa, informó el fiscal especializado en materia de Derechos Humanos de la Fiscalía General del Estado (FEG), Pablo Alvarado Silva.
Señaló que esta estadística revela que existe voluntad del Estado a través de la FGE, la Comisión Estatal de Búsqueda, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, la Guardia Nacional, fuerzas militares, las comisiones de Derechos Humanos, la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas (CEEAV) e incluso autoridades ejidales y la colaboración e impulso de los colectivos de personas desaparecidas que los acompañan en los operativos.
Alvarado Silva explicó que las 67 búsquedas se han realizado desde febrero del 2017 en Huehuetlán, en la Huasteca, hasta la más reciente en Venado la semana pasada, periodo durante el cual han tenido en 42 fosas resultados positivos, entre 10 y 12 personas ya han sido identificadas y entregadas de manera digna a sus familiares.
Respecto a Moctezuma, el fiscal especializado detalló que la Fiscalía General de la República y la División Científica de la Guardia Nacional que los apoyan en la clasificación de los restos, calculan que pertenecen al menos a 20 personas, “en el ejido Matanzas, en Moctezuma, lo que localizamos fueron fragmentos calcinados, de dos, de cinco, de diez centímetros de longitud, es muy importante el trabajo de los antropólogos físicos y forenses para que establezcan a cuántas personas pertenecían estos restos. Como es una búsqueda reciente tendremos un informe en un mes, estamos hablando de entre 500 y 700 gramos de fragmentos”, indicó.
Pablo Alvarado señaló que en lo que va del 2021 han logrado identificar a cuatro personas, de las cuales dos ya están entregadas a sus familiares en Villa de Reyes y en Ciudad Fernández, en la Zona Media; el hallazgo ocurrió en un pozo de más de 35 metros de profundidad de donde extrajeron un vehículo fragmentado y los restos humanos, mientras que los otros dos fueron en Zaragoza y El Naranjo.
Explicó que 90 por ciento de las búsquedas se derivan de carpetas de investigación o averiguaciones previas que tienen iniciadas y que del contexto que logran investigar advierten que a esos lugares a los que van existe la posibilidad de que haya fosas clandestinas, “cuando encontramos restos extraemos el ADN y con el banco de datos de los familiares se lleva a cabo una correspondencia, cuando nos da ese hit logramos establecer la identidad a través de la prueba científica de genética forense”, subrayó.
OBRA DEL CRIMEN ORGANIZADO
El fiscal especializado en materia de Derechos Humanos de la FEG dijo que en el trabajo de esclarecimiento de las desapariciones y hallazgos tienen 10 carpetas de investigación judicializadas por el delito de Desaparición Forzada por Particulares donde tienen probables intervinientes y personas vinculadas a proceso, entre ellas servidores públicos como policías a quienes se les ha demostrado su participación.
“Es gente que no participa de manera individual, sí se establece que son más de dos o tres personas quienes están llevando a cabo estas acciones con una finalidad de ocultarlo para tener un beneficio, las líneas van tendientes a establecer que son grupos de la delincuencia organizada que privan de la vida a personas con la intención de ocultarlas”, acentuó.
Abundó que del 2017 a la fecha que operan en la búsqueda de personas desaparecidas ya con la operatividad de la Unidad Especializada y también con las políticas públicas con la creación de la Ley General de Personas Desaparecidas que toma su vigencia en enero de 2018, es una realidad que se ha venido visibilizando ese delito.
“Pero considero que desde el 2010-2013 los grupos delincuenciales vienen operando estos eventos, hablar de incrementos, del antes y ahora, sería aventurado, la gran realidad es que las desapariciones existen desde esa temporalidad, tenemos casos, sobre todo en la Huasteca, que seguimos investigando, es desafiante pero no imposible continuar con las investigaciones y la búsqueda”, apuntó.
con información de Pepe Alemán/El Exprés