Los habitantes de los municipios Genaro Codina y Cuauhtémoc, en el Estado de Zacatecas, están en alerta máxima por el desbordamiento de la presa San Aparicio por las intensas lluvias en la entidad. La noche de este jueves la ruptura de la presa ocasionó severas inundaciones que han provocado el desalojo de, al menos, 62 personas de sus viviendas y fueron llevadas a los albergues habilitados por Protección Civil.
Aún no se tiene el reporte de fallecidos o personas desaparecidas. El gobernador del Estado, David Monreal, informó de que ante el desborde de la presa se activaron los planes de emergencia de la Secretaría de la Defensa y la Guardia Nacional. Hasta el momento, las autoridades estatales reportan un avance de un 60% en las tareas de limpieza y remoción de escombros. Además, de un monitoreo de la presa Infiernillo que también reportó que estaba llegando al límite de su capacidad.
El presidente municipal de Genaro Codina, Mario Adrián Reyes, reconoció que la presa se rompió y está destruida. Además, están dañados los tres principales puentes que comunican con la cabecera municipal, cuya importancia es fundamental, porque son los que hacen posible el traslado de las personas a sus trabajos. Aún no hay servicios de agua potable, drenaje y electricidad, murieron animales y aún se continúa con el recuento de los daños materiales. Los habitantes de estas comunidades han compartido a través de sus redes sociales numerosos videos que dan cuenta de la fuerte corriente del agua ha afectado decenas de viviendas y negocios, principalmente en las comunidades de San Inés, Monte Grande, Paso de Méndez y la cabecera municipal de Genaro Codina.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) y de Protección Civil realizan el monitoreo de otra presa denominada El Infiernillo para conocer la situación de la estructura del cauce, además de que se realiza la evaluación de daños materiales en ambos municipios. En su reporte meteorológico la Conagua explica que las intensas lluvias en casi todos los Estados del país se deben a la onda tropical 31 que interaccionará con un canal de baja presión que se ubicará desde el occidente hasta el centro del país, y por canales de baja presión extendidos sobre el noroeste y oriente de México.
La voz de alarma entre los habitantes de Zacatecas se ha encendido con mayor rapidez debido a las más recientes inundaciones por el desbordamiento del río Tula, en el Estado de Hidalgo. El nivel del agua dejó un saldo de 17 fallecidos y 10.000 evacuados. Los fallecidos eran pacientes de coronavirus de un hospital del IMSS. Las inundaciones dejaron a este centro médico sin electricidad y por ende sin el sistema de oxigenación para estos pacientes. En ese momento el gobernador del Estado, Omar Fayad, reconoció que era la peor tragedia para el municipio de Tula de los últimos 40 años.
con información de El País