El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que el sistema dejará ambiente “extremadamente frío” en el norte del país; además, el sistema frontal número 23 y su masa de aire polar golpearán al centro, oriente y sureste del país
A lo largo de la mañana de este jueves 20 de enero, se desplazará sobre el norte de México la tercera tormenta invernal. Y no será el único evento que desestabilizará el clima. Al mismo tiempo, el frente frío 23 avanzará por el oriente hacia la Península de Yucatán. Los dos fenómenos pondrán fin a la calma y nos obligarán a despedirnos durante unos días del ambiente estable y templado.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que la tercera tormenta invernal afectará al norte, provocando “ambiente matutino extremadamente frío en la región”, con vientos intensos y lluvias fuertes que “podrían generar incremento en los niveles de ríos y arroyos, así como deslaves e inundaciones, en zonas bajas de Tamaulipas, Nuevo León y San Luis Potosí”.
Además, podría presentarse caída de nieve o aguanieve en las zonas montañosas de Chihuahua, Coahuila y Nuevo León, condiciones que durante la tarde podrían extenderse también a las partes altas de Tamaulipas y San Luis Potosí.
Mientras la tormenta invernal sacude al norte, el frente frío 23 se encargará de azotar al centro, este y sureste de la República, causando lluvias intensas en Veracruz y Puebla y chubascos en otras entidades. Tras él, su masa de aire polar originará “un marcado descenso de temperaturas” en la Mesa del Norte y Central.
Como consecuencia de los eventos descritos se esperan registros bajo cero en 11 estados. Los más bajos se pronostican en las sierras de Chihuahua, Durango y Coahuila, de -10 a -5ºC. En áreas montañosas de Sonora, Baja California, Nuevo León, Zacatecas, Aguascalientes, Jalisco, Guanajuato, Estado de México, Morelos y Veracruz, irán de -5 a 0ºC.
Además, en las cimas montañosas que superen los 4,000 metros de altura sobre el nivel del mar, ubicadas en Edomex, Tlaxcala, Puebla y Veracruz, las condiciones serán favorables para la caída de nieve o aguanieve.
Las mínimas también serán muy frías en otros estados. De acuerdo al organismo climático, en partes altas de Tamaulipas, San Luis Potosí, Michoacán, Querétaro, Hidalgo, Ciudad de México, Oaxaca, Chiapas, Tlaxcala y Puebla, los termómetros se moverán entre 0 y 5ºC al amanecer y anochecer.
Lluvias fuertes
Por la influencia de la tercera tormenta invernal y el frente frío número 27, se pronostican lluvias en 26 estados del territorio nacional.
Los mayores acumulados caerán en Puebla y Veracruz, con registros intensos que podrían alcanzar los 150 milímetros y causar serios estragos, como inundaciones, encharcamientos y deslaves. Esos efectos también se prevén en Tamaulipas, Nuevo León y San Luis Potosí, donde las precipitaciones serán fuertes, de 25 a 50 milímetros.
En el resto de entidades las lluvias serán más débiles. Se prevén chubascos de hasta 25 milímetros en Chihuahua, Coahuila, Michoacán, Hidalgo, Tlaxcala, Querétaro, Guanajuato, Morelos, Estado de México, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo; mientras que en Durango, Zacatecas, Aguascalientes, Jalisco y la Ciudad de México, se pronostican acumulados aislados de un máximo de cinco milímetros.
Vientos intensos
En cuanto a los vientos, los más importantes se pronostican en el litoral de Tamaulipas y en la costa norte de Veracruz, por el “evento de norte” que causará la masa de aire polar del frente frío 23. Allí las rachas llegarán a los 90 kilómetros por hora y se extenderán durante la madrugada del viernes hacia el litoral del Golfo de México, y al Ismo y Golfo de Tehuantepec.
Mientras, en el norte, las ráfagas serán provocadas por la tercera tormenta invernal. En Nuevo León se registrarán las más intensas, del orden de 70 a 80 kilómetros por hora.
En Baja California, Chihuahua, Coahuila y Tamaulipas irán de 60 a 70 km/h, y en Baja California Sur, Sonora, Sinaloa, Zacatecas y San Luis Potosí alcanzarán velocidades de 50 a 60 kilómetros por hora.
En las costas de Veracruz y Tamaulipas, además, las olas podrían rozar los cuatro metros de altura, por lo que se pide a la población extremar precauciones.