La economía de México entró en recesión técnica luego de registrar caídas consecutivas en el tercer y cuarto trimestre de 2021 debido al impacto de la pandemia, que afectó sectores clave como los servicios y el comercio, aunque eso no evitó que la economía cerrase el año con una activación de 5%.
El estancamiento registrado en la segunda mitad del año pasado hace prever a los analistas que por lo menos en el primer trimestre de 2022 se mantendrá el comportamiento desfavorable de la economía mexicana ante el repunte del coronavirus y la débil inversión productiva, situación que se agrava por la aceleración de inflación que está golpeando a los mayoritarios sectores pobres.
Entre octubre y diciembre, la segunda mayor economía de Latinoamérica sufrió una contracción de 0,1%, en comparación con el período previo, acumulando así dos trimestres consecutivos de caídas, de acuerdo con las cifras que difundió el lunes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Entre julio y septiembre, el aparato productivo tuvo un retroceso de 0,4%.
Las caídas registradas de julio a septiembre llevaron a algunos analistas a afirmar que México entró en un período de estancamiento, y que la recuperación de este año será más lenta de lo esperado debido a la pandemia y las limitaciones que aún persisten en algunas cadenas de producción que están afectando la oferta de ciertos bienes y servicios.
“La economía volvió a desilusionar ya que continuó sin fuerzas para remontar el crecimiento”, afirmó Alfredo Coutiño, director de análisis para América Latina de la firma Moody´s Analytics, al reconocer que el aparato productivo mexicano “entró en recesión técnica” al cierre de 4to trimestre.
La afirmación de que México entró en un período de recesión técnica o estancamiento, que se refiere a un decrecimiento de la economía durante dos trimestres consecutivos, generó posiciones encontradas. Mientras algunos analistas afirmaron que sí se podía hablar de recesión técnica debido a que la contracción se dio durante toda la segunda mitad del 2021, otros expresaron dudas alegando que la caída no fue tan profunda y no fue generalizada debido a que sólo afectó al sector terciario.
La directora de análisis económico del grupo financiero Banco Base, Gabriela Siller, dijo que el comportamiento negativo del PIB en la segunda mitad de 2021 estuvo asociado a la cautela ante la cuarta ola del covid, efectos de la reforma outsourcing, alta inflación, e incertidumbre política.
con información de AP