La tenista potosina Fernanda Contreras llega a Wimbledon con la esperanza de hacer historia, una mexicana que es nieta de una leyenda del tenis nacional y que llegó al pasto sagrado sin entrenador por falta de apoyos.
¿Por qué Fernanda Contreras llegará a Wimbledon sin entrenador?
Este lunes, Fernanda Contreras debuta en Wimbledon, han pasado 27 años desde que una mexicana pisó Wimbledon por última vez, lo que es un logró ante la escasez de talento del tenis femenil en el país.
Angélica Gavaldón fue la última en llegar a Wimbledon, en 1995 una mexicana pisó por última vez el All England Club y ahora, Contreras puede hacer historia, a pesar de que llegó sin su entrenador por falta de apoyo de la Federación Mexicana de Tenis.
Contreras estará prácticamente sola en el torneo, sin lujos de entrenadores y preparadores físicos, además de que cursó una carrera de ingeniería en Estados Unidos, gracias a una beca que ganó hace algunos años.
Emilio Sánchez Vicario es el consejero de Fernanda a quien ve como una jugadora “especial”, además que la entrena en su clínica en Florida.
Tanto Emilio Sánchez Vicario como Risto van Rensburg, 5 en dobles y top 20 en los 80, la entrenan en Florida. Saben que no cuenta con recursos para pagar, por lo que no cobran un sólo centavo y sólo quieren ver triunfar a la mexicana.
“Es súper exigente lo que ha logrado. Las tenistas universitarias, al intentar dar el salto, se pasan dos años sufriendo, porque en los primeros torneos que juegan, por perder en primera ronda, les dan solo 100 dólares”, dijo Emilio Sánchez Vicario.
En Wimbledon, Fernanda Contreras llegará sin entrenador, es raro ver a un jugador en este tipo de torneos sin su consejero principal, pero este será el caso de la mexicana, quien sólo contará con el apoyo de su hermana.
Pancho Contreras inspiró a Fernanda Contreras para incursionar en el tenis
Contreras creció escuchando las historias de su abuelo en el All England Club, el legendario Pancho Contreras, quien en 1958 alcanzó las semifinales del dobles mixto en Wimbledon.
En cada comida de Navidad, tal y como recuerda la tenista, su abuelo le hablaba de las tradiciones de Wimbledon, del blanco, del pasto, de las fresas con nata.
Vicario vio cómo Contreras es dedicada a su deporte, suele anotar todas las enseñanzas y repetirlas constantemente, además que que no hay un no en ninguna de las recomendaciones que dan para mejorar su juego.
“Una de las cosas que más me sorprendió es que cuando le explico las cosas ella lo apunta todo. Lo escribe en una libreta y luego lo pasa a limpio. Le encanta estructurar todo y tenerlo todo marcado. Tiene una gran capacidad para asimilar las situaciones. Esto le viene por ser ingeniera. Gracias a esto, no le importa estar sola. Se va a pasear, se pone a leer y no tiene problemas”, explicó.
Pese a su preferencia estudiantil por los números, Contreras ha usado la escritura también para desahogarse, superar la pandemia y mejorar en la pista. Ha escrito hasta una novela, influida por las historias de Ken Follet y Dan Brown y ambientada en parte en el Museo Británico.
Los ídolos de Contreras son Roger Federer y Ashleigh Barty, quiere emular los logros de esta última y ser una de las mexicanas más exitosas en el mundo del tenis. Sin entrenador, sin apoyo y con el peso de un apellido legendario, así llega Contreras al pasto sagrado de Wimbledon.
Con información de: Radio Fórmula
