Luego de tres décadas de abandono, emerge una treintena de creadores en la exposición ‘Bajo el mismo México. Las colecciones Kaluz y Juan Coronel Rivera 1921-1973’
Artistas visuales como Rafael Navarro, Carlos Felipe Vázquez, Delfino García, Carlos Rodríguez Mora, Flora Martínez Bravo y Rosendo Salazar, quienes fueron relegados por la historia del arte mexicano, son recuperados en una exposición, luego de permanecer sumergidos en tres décadas de olvido.
Así lo muestra la exposición Bajo el mismo México. Las colecciones Kaluz y Juan Coronel Rivera 1921-1973, inaugurada este fin de semana en el Museo Kaluz de la CDMX, que exhibe 90 obras de 86 artistas.
Esta exposición —que incluye algunas piezas de Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y María Izquierdo— busca aportar una nueva visión para reescribir la historia de la pintura en México, en específico del periodo posrevolucionario hasta la década de los 70, cuando muere Siqueiros y se considera que desaparece la Escuela Mexicana de Pintura (EMP)”, detalló en entrevista Raúl Cano Monroy, curador de la muestra.
Al mismo tiempo, detalló, la exposición presenta las coincidencias y divergencias de ambas colecciones, así como la obra de aquellos pintores, que son medianamente conocidos, pero tampoco se les ha dado importancia, como Celia Calderón, Rosendo Soto y Amador Lugo.

Sin embargo, la mayor apuesta de la muestra está en la revisión de los artistas que fueron totalmente relegados.
Puedo mencionar, por ejemplo, a Carlos Felipe Vázquez, un artista que en la década de los años 40 y 50 expuso de manera recurrente en distintos espacios e, incluso, Lola Álvarez Bravo le realizó una muestra individual en la Galería de Arte Contemporáneo (en 1953), donde Frida Kahlo tuvo su primera exposición. Sin embargo, en los años 60 desapareció.
Cano Monroy también destacó la obra de Rafael Muñoz López, cercano a Roberto Montenegro, quien expuso en distintos espacios junto a los artistas consagrados, como Rivera, Siqueiros y María Izquierdo, pero de él, desgraciadamente, se sabe muy poco.
Otro creador relegado es Carlos Rodríguez Mora, quien en los años 40 y 50 tuvo exposiciones individuales y colectivas, por ejemplo, en el Círculo de Bellas Artes, aunque años después desapareció del circuito.
También destacó a Delfino García, artista que fue el alumno predilecto del pintor japonés Tamiji Kitagawa.
Su obra fue promovida en Estados Unidos por Inés Amor, a finales de los años 30, en esas exposiciones que enviaban al extranjero e, incluso, expuso junto a Rufino Tamayo, María Izquierdo y Manuel Rodríguez Lozano.
Años después, Delfino García dejó de tener presencia en México, aunque su obra permanece en diversas colecciones en EU.
Una más es Flora Martínez Bravo, quien afirmaba ser sobrina de Manuel Álvarez Bravo, una de las artistas más importantes en San Luis Potosí.
Ella era amiga de Siqueiros y conocía a Tamayo, así que tenía relación con la capital, pero, al igual que muchos artistas más, quedó relegada”.
Con Información de Potosí Noticias.