El gobierno de Donald Trump aprobó el lunes importantes cambios a la forma en que se aplica la Ley de Especies en Peligro de Extinción, una medida que, según la administración, reducirá la carga regulatoria.
Sin embargo, los críticos dicen que esto llevará a muchos animales hacia la extinción.
La Ley de Especies en Peligro de Extinción es reconocida por ayudar a salvar el águila calva, el cóndor de California y muchos animales y plantas de la extinción desde que el presidente Richard Nixon la promulgó en 1973.
La administración Trump dice que los cambios harán la regulación más eficiente y menos onerosa y protegerá la vida silvestre.
Al menos 10 fiscales generales se unieron a grupos conservacionistas en protesta por un borrador de los cambios, diciendo que ponen a más vida silvestre en mayor riesgo.
Las organizaciones ecologistas temen que sea muy probable que las nuevas reglas faciliten el camino para la nueva minería y la extracción de petróleo y gas en áreas donde viven especies protegidas.
Una versión preliminar de los cambios lanzada el año pasado incluyó poner fin a las protecciones generales para los animales considerados amenazados recientemente y permitir a las autoridades federales por primera vez considerar el costo económico de proteger una especie en particular.
Otro cambio podría permitir a las autoridades ignorar los impactos del cambio climático, una de las mayores amenazas para el hábitat, alertan los grupos de conservación.
La regla final se adhiere ampliamente a esos cambios, según una persona con conocimiento del tema que no estaba autorizada a hablar públicamente sobre ellos.
Los conservacionistas ya prometieron acciones legales.
Un informe de la ONU advirtió en mayo que más de un millón de plantas y animales en todo el mundo -un récord- podrían desaparecer, algunos en décadas, debido al desarrollo humano, el cambio climático y otras amenazas.
Con información de Excélsior