Josephine Gillan, quien fue conocida por aparecer en la serie Game Of Thrones, denunció en redes sociales que su hija de ocho meses fue “secuestrada” en plena noche por trabajadores sociales en Israel.
La bebé de Gillan se encontraba bajo el cuidado de una amiga de la actriz mientras ella se recuperaba de depresión posparto, relató en sus cuentas de Instagram y Twitter.
Un video subido por la actriz mostró a su hija, Gloria, cuando era retirada de la casa de la amiga por los servicios sociales, mientras era escoltada por dos hombres uniformados.
Se puede escuchar a la persona que filmó el incidente gritando a los trabajadores sociales mientras los oficiales de protección infantil se dirigen a un automóvil, que espera y se va.
La actriz de 31 años detalló la forma poco común de llevarse a su bebé, ya que fue a las 00:30 del domingo, y relató que su amiga fue amenazada con ser encarcelada si no entregaba a su bebé
“¡Nada más que enfermos #trabajadores sociales #servicios sociales tratando de arruinar vidas y separar a un bebé de su madre, que no ha hecho nada malo! ¡Secuestraron a mi bebé!”, escribió la británica que interpretó a Marei, una prostituta en la serie Game of Thrones.
Su bebé se fue a vivir con una amiga mientras ella se sometía a terapia para la depresión posnatal, por orden, precisamente, de los servicios sociales.
Gloria había estado viviendo con ella nuevamente hasta que se la llevaron la semana pasada y Josephine no ha podido volver a verla desde entonces.
Gillan, que es judía, se mudó a Israel poco antes de dar a luz a su pequeña. El bebé estaba al cuidado de su amiga mientras Gillan se sometía a terapia por depresión posparto.
A pesar de que las autoridades israelíes aprobaron ese acuerdo, afirma la actriz, “se abalanzaron y se llevaron al bebé”. Las madres que padecen depresión posparto tienen sentimientos de extrema tristeza, ansiedad y cansancio que les dificultan realizar las actividades diarias del cuidado de sí mismas y de otras personas.
Josephine publicó también una cuenta en la página de GoFundMe para recaudar dinero para que un equipo legal la ayude a cuestionar la decisión.
“¡No se me permite verla ni tener contacto! ¡No tengo idea de dónde está! ¡No estaba allí en ese momento y no sabía lo que habían hecho! ¡Es absolutamente indignante! No lo he hecho. ¡Algo está mal y mi amiga tampoco sabe nada de mi bebé!” denunció.
“¡Ningún niño debería estar sin sus padres! ¡Especialmente si son buenos y cuidan al niño devotamente!”, dijo Josephine, quien detalló en la página de recaudación que no está trabajando en este momento y por eso está pidiendo donaciones para ayudar con los costos legales.
“Aprecio que leas esto y, por favor, encuentra en tu corazón para ayudar y también tus oraciones significarían mucho también. Estoy desconsolada en
este momento y solo quiero volver a estar con mi bebé otra vez”.
Game Of Thrones la salvó de la prostitución y las drogas
Josephine Gillan ha declarado en entrevistas previas que la serie de ficción fue una salvación para ella, ya que su vida había caído de mal en peor tras sufrir abuso sexual cuando era niña.
La actriz dijo en una entrevista con Daily Mail que ser elegida para el papel cambió su vida.
“Game of Thrones me salvó de una vida de prostitución, y me ha hecho una persona mucho más fuerte. Estaba trabajando como prostituta y, al mismo tiempo, trabajando en películas para adultos, usando el nombre Sophie O’Brien, cuando vi un anuncio para actrices en cine. Estaban buscando a mujeres jóvenes con busto natural y sin tatuajes, a quienes no les importara ser filmadas desnudas”.
La actriz contó que por muchos años le había resultado difícil establecer relaciones con otras personas, pues durante su juventud había sufrido abuso sexual y pasó por una adicción a la cocaína.
Sin embargo, explicó que entrar a Game of Thrones le ayudó a conocer a personas que habían tenido experiencias similares.
Gillan, cuyo personaje trabaja como prostituta en un burdel de King’s Landing, dijo que los fans del programa frecuentemente le preguntan si las escenas de sexo son verdaderas.
“Yo les contesto: ‘¿Los dragones o los zombis son reales?'”, comentó.
Dijo que, a diferencia de algunos de sus colegas, a ella no le intimida filmar esas partes del show.
“La verdad es que los actores hombres se sienten tan incómodos haciendo escenas de sexo que los suelo sentir temblando debajo de mí. Creo que sufren de pánico escénico, porque están casi desnudos y por lo general hay como treinta integrantes del equipo de producción en el set”, dijo.
Gillan asistió a veinticuatro escuelas primarias diferentes, ya que su madre huyó de una relación violenta y fue rescatada por los servicios sociales a los 12 años, tras lo cual fue destinada a una familia de adopción.
Con información de INFOBAE