Un niño israelí de dos años fue mordido en el rostro por un leopardo mientras visitaba un zoológico acompañado de su familia en la isla tailandesa de Ko Samui, informó The Times of Israel.
El incidente ocurrió el pasado 22 de agosto y se conoció días después, luego de que circularan por Internet imágenes de una cámara de seguridad del recinto donde habita el leopardo. En ellas se observa cómo uno de los visitantes —al parecer el abuelo del niño— abre la puerta del lugar para observar al felino, pero este aprovecha para escapar, generando pánico y alarma entre los presentes. Varios segundos después el carnívoro es encerrado nuevamente.
Aunque en el video no quedó registrado el momento exacto del ataque al menor, los testigos aseguran que funcionarios del parque se vieron obligados a golpear al animal para que soltara al pequeño, quien tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en un hospital local. Actualmente se encuentra en Israel y está fuera de peligro.
Medios tailandeses señalan que la víctima resultó con una herida en la cara y en un pómulo. Un consultor del zoológico explicó que el leopardo de seis años, de nombre Tony, suele ser manso, pero pudo haberse sobresaltado. Los gastos de tratamiento médicos corrieron por cuenta del parque, resaltó el funcionario.
El zoológico aseguró que se ha dispuesto personal adicional para controlar que los visitantes no entren solos y recomendó no ignorar las señales de advertencia y seguir todas las recomendaciones del personal.
Con información de RT