El juicio de desahogo de pruebas del caso de Lesvy Berlín Rivera Osorio, la joven de 22 años cuyo cuerpo fue hallado sin vida en Ciudad Universitaria el 3 de mayo de 2017, fue pospuesto 24 horas, a petición de la defensa legal del inculpado, Jorge Luis González, bajo el argumento de que todavía no estaba “empapado” del asunto.
No habían pasado ni tres minutos de haber iniciado la diligencia, cuando el abogado de la parte acusada, Francisco Jesús Gallegos, solicitó al juez aplazar la audiencia al menos un mes, pues adujo que “no se encuentra preparada”.
El juez José Juan Pérez Soto calificó dicha afirmación como una falta de respeto, por lo que se negó a acceder a dicha petición y sólo le dio un plazo máximo de 24 horas.
Gallegos aclaró al juzgador que no se había terminado de “afinar” la defensa, debido a que él y su colega Rodrigo González Ponce habían asumido la defensa del presunto feminicida el pasado 19 de junio y que hasta el 28 del mismo tuvieron acceso a la carpeta de investigación.
El juez Pérez Soto dio entonces indicaciones de contactar a la defensoría de oficio que antes representaba a Jorge Luis para continuar con las audiencias.
Inconforme, el imputado reclamó al juez su derecho a elegir a su defensa: “no me limite mi libertad de defensa. No me imponga la defensoría pública”, reclamó.
Pese a los intentos de la defensa por aplazar el juicio 30 días más y luego de un receso de 10 minutos, acudieron al tribunal los abogados de oficio Leticia Hernández López, José de Jesús Sánchez y Florencio López Torres, y solicitaron 24 horas para preparar su estrategia.
Al salir de la audiencia, Aracely Osorio Martínez, madre de Lesvy, consideró delicado que, a más de dos años y cuatro meses del asesinato de su hija, nuevamente se haya retrasado el juicio.
“Nos parece delicado que el día de hoy nuevamente no pudiéramos iniciar el juicio ya que como ustedes saben han ya transcurrido prácticamente dos años y cuatro meses en que hemos esperado este juicio”.
Asimismo, responsabilizó a Jorge Luis González de retrasar el proceso con argumentos que no corresponden a una debida diligencia.
Apenas en julio pasado, el presunto feminicida solicitó seguir su proceso en libertad, bajo el argumento de que había pasado más de dos años en prisión sin que se le hubiera dictado sentencia, pero su petición fue rechazada, pues el juez determinó que la defensa del imputado ha sido la responsable de prolongar el proceso.
La madre de Lesvy denunció que se sigue obstaculizando el acceso de la familia a la justicia pronta y expedita, por lo que solicitó a los tres jueces que componen el tribunal iniciar las audiencias más temprano y terminarlas lo más tarde posible con el objetivo de reponer el tiempo perdido hoy y dar oportunidad a las personas extranjeras que intervendrán en el caso.
“Nos parece que se sigue obstaculizando nuestro acceso a la justicia y el tiempo que pase es la verdad que huye”, manifestó.
Aracely Osorio afirmó que no está en contra que Jorge Luis tenga una buena defensa legal, puesto que no debe quedar “ninguna duda de quién mató a mi hija, pero reiteró su preocupación por el retraso.
Se espera que mañana comience por fin el juicio en el que al menos 28 testigos y peritos tratarán de determinar qué fue lo que ocurrió la madrugada del 3 de mayo de 2017 en la caseta telefónica donde fue hallado el cuerpo sin vida de Lesvy.
Las siete audiencias programadas hasta el 20 de septiembre se llevaron a cabo en los juzgados del Reclusorio Varonil Preventivo Oriente, donde Jorge Luis González cumple prisión preventiva desde julio de 2017.
Afuera del Reclusorio también se llevó a cabo una jornada político cultural en apoyo a la familia de Lesvy y para exigir que el caso sea juzgado con perspectiva de género.
Con información de Proceso