Entre las acciones más relevantes en este primer año de Gobierno Municipal, la Dirección de Ecología y Aseo Público sobresalen tanto en acciones operativas como de inspección, además de reforestación de los principales pulmones de la ciudad, adicional a fomentar la cultura del respeto al bienestar animal.
Por ello, se realizaron más de 520 inspecciones de negocios, establecimientos comerciales y de servicio para atender las denuncias ciudadanas en materia de daños al medio ambiente y de imagen de nuestra ciudad, así como para implementar medidas preventivas y normativas para evitar el deterioro ecológico. De ahí que se creó también la Coordinación Jurídica de Inspección Ambiental.
En relación a la reforestación, derivado de acuerdos con diversas empresas y asociaciones civiles, se redoblaron las acciones de riego, limpieza y deshierbe continuo, además de sembrar más árboles, particularmente en el parque urbano “Paseo de la Presa”, por ser un espacio emblemático no sólo para la capital potosina, sino para todo el estado, a fin de preservar esta zona de recarga natural del acuífero del valle de San Luis Potosí.
Estas labores de plantación llegaron también a varios camellones entre los que sobresalen los ubicados en Zona Industrial, Carretera Rioverde, los Ejes 122, 123 y 124; además se lograron acuerdos para la reforestación de áreas comunes en Ciudad Satélite, así como con representantes de manzanas de diversas colonias de la ciudad.
Acerca de la protección de los derechos de los animales, junto con más de 50 asociaciones protectoras y el Colegio de Médicos Veterinarios de San Luis se creó el Programa de “Bienestar Animal” y se arrancó la campaña “Sin Correa No”, que incluyó más de 40 pláticas con una asistencia de 2 mil personas.
Asimismo, se restauró y reparó la Unidad Móvil de Esterilización, la cual dio atención a mascotas en 14 puntos de la ciudad en beneficio de habitantes de más de 70 colonias.
Por último, la Dirección de Ecología junto con Protección Civil, Seguridad Pública, Dirección Comercio, INTERAPAS y la Coordinación de Derechos Humanos, así como la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (SEGAM), hicieron recorridos por las ladrilleras y decomisaron residuos peligrosos y de manejo especial como aceites, llantas, trapos impregnados, plásticos, entre otros prohibidos en la normatividad ambiental
