En el contexto del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que se conmemora hoy, organizaciones, colectivos y estudiantes se concentran en el Ángel de la Independencia para marchar rumbo al Zócalo.
Las mujeres comenzaron a llegar a las inmediaciones del monumento desde las cuatro de la tarde. En su mayoría las manifestantes portan pañuelos verdes, color que distingue la lucha por la despenalización del aborto, y prendas moradas, en referencia a los feminicidios.
“¿Cuántas mujeres más tienen que morir?”, se pregunta Viviana, estudiante de la Preparatoria 8 de la Universidad Nacional Autónoma de México, y una de las participantes de la movilización. “Nos siguen acosando, violando, ¿cuánto más hace falta para que la gente haga algo?”.
Previo al inicio de la marcha, algunas de las manifestantes han quitado el plástico con el que las autoridades capitalinas cubrieron los monumentos que se encuentran en Paseo de la Reforma, y han hecho pintas. En su mayoría son mujeres vestidas de negro y con el rostro cubierto.
El Gobierno de la Ciudad de México anunció el despliegue de más de 3 mil 500 policías por la marcha, además del acompañamiento de 2 mil servidoras públicas.
Ante estas medidas, Terremoto Feminista, una de las colectivas que convocaron a la manifestación, expuso que la respuesta “con un cerco policiaco es un mal mensaje del gobierno en un día donde la lógica indica que debe mostrarse sensible y en disposición de apertura ante las justas demandas que suscriben políticas que traten de fondo la atención y prevención de la violencia”.
Insistieron en que la marcha que se llevará a cabo será pacifista y por la defensa de nuestros derechos humanos”. Consideraron excesiva la presencia del gobierno con fuerzas policiacas y “se asume como un acto de provocación que anuncia un potencial riesgo contra las participantes de la marcha”.
De acuerdo con elementos de la policia capitalina al lugar han llegado entre mil 200 y mil 500 mujeres. Algunas cargan palos, martillos, armas punzo cortantes, bengalas, aerosoles y gasolina.
Durante el recorrido realizan pintas y gritan consignas. La mayoría acudió vestidas de negro y esbozadas de la cara. Incluso los elementos de la ssp capitalina ni el cinturón de seguridad confirmado por mujeres, impidieron a las manifestantes romper los vidrios de la estación del metrobús La Palma.
Con información de La Jornada