Siempre que vamos a un pachangón como una boda, pensamos en entrarle sabroso a la comida. No se hagan, casi todos esperamos ese día para entrarle duro y tupido a los manjares que se sirven en tan singular día. Aunque la mayoría se de un atascón, siempre sobran un poco de todo y estos novios quisieron ayudar un poquito a todas las personas que no la están pasando de maravilla.
Esta historia ocurrió en Ciudad Victoria, Tamaulipas y los protagonistas son Lorena y Alejandro. Normalmente cuando una pareja decide dar el sí en el altar, lo que sigue es movilizarse con toda su familia y seres queridos a la sede de la fiestota para después irse de luna de miel, pero antes de pasar sus primeras vacaciones como esposos, estos novios decidieron sorprender a las personas de un hospital infantil.
Con todo y tacuche, los novios se bajaron del carro que los llevaba hasta la entrada del Hospital Infantil de Ciudad Victoria. Una vez que cruzaron las puertas, la pareja sorprendió a toda las personas que estaban ahí esperando saber algo de sus familiares al regalarles pastel, bebidas y más con la única intención de compartir y darles una pequeña alegría en momentos tan difíciles.
“Buenas noches. Traemos unos platillos, pechugas, papas y verduras. No sé si tengan hambre, para que vengan y nos acompañen a nosotros a cenar, para darles un regalo de parte de los novios. Sabemos también que hay gente que a lo mejor ahorita no está festejando por así decirlo, y pensamos en qué podemos hacer con toda la comida que teníamos“, fue parte de lo que dijeron Lorena y Alejandro para después repartir con platos desechables la comida con todos los que estaban ahí.
Con información de Sopitas