18 personas han muerto en la República Mexicana a causa del virus de la influenza de acuerdo a cifras del Informe Semanal de la Temporada de Influenza hasta la semana 49.
Del total de muertes el 69 por ciento son a causa del virus AH1N1, el 33 por ciento a causa del subtipo AH3N2 y el seis por ciento a causa del virus tipo A.
A pesar de las muertes, tanto la Secretaría de Salud, IMSS e ISSSTE coinciden en que se trata de una temporada con un comportamiento estable y que se cuenta con el abasto suficiente de vacunas del antiviral indicado contra la influenza, el oseltavir.
Entre las señales de influenza se encuentran: fiebre alta, dolor muscular y de cuerpo en general, ataque al estado general, tos, dolor de garganta y escurrimiento nasal, entre otros síntomas.
Algunas de las complicaciones que puede ocasionar la influenza son la neumonía, inflamación del aparato respiratorio inferior y de los pulmones con graves daños o insuficiencia de la función respiratoria, a tal grado que la persona puede necesitar hospitalización y servicios de terapia intensiva.
La población en riesgo de sufrir complicaciones por influenza debe acudir a vacunarse, como son las niñas y niños de seis meses a menores de cinco años, población de 60 o más años, quienes viven con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), diagnosticados con diabetes, sobrepeso, obesidad o cáncer, así como mujeres embarazadas sin importar su edad, estado de salud o etapa de gestación, ya que la vacuna es segura para ellas y para el bebé en gestación.
También deben vacunarse quienes padecen problemas respiratorios graves, como enfisema pulmonar, Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), bronquitis y asma, o que usan medicamentos que deprimen el sistema inmune, ya que la vacuna no evita el contagio pero sí disminuye la agresividad del virus.
La vacuna no produce enfermedad, y si después de aplicársela se presenta gripe, puede ser porque el virus ya estaba en el cuerpo previamente, pero no se había manifestado porque estaba en periodo de incubación.
La influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa de origen viral que infecta principalmente nariz y garganta, y en algunos casos los pulmones, por lo que puede causar daños que van de leves a graves, y la vacuna no evita la enfermedad, sino mitiga complicaciones graves, infecciones severas, neumonía y evita muerte.
Con información de Debate