La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) investiga presuntas triangulaciones de la Secretaría de Gobernación (Segob) a las empresas de Genaro García Luna no sólo en el gobierno de Felipe Calderón, sino también de Enrique Peña Nieto. Fuentes cercanas a la investigación confirmaron que la transferencia de 2 mil millones de pesos que se habría hecho desde la Segob a las empresas vinculadas con el ex secretario de Seguridad Pública se dio de manera diferida al final del sexenio panista y el inicio del priista, es decir, en 2010, 2013 y 2017.
Ayer, el titular de la UIF, Santiago Nieto, dijo que esta transacción “ampara el bloqueo de cuentas por ser una empresa de la que García Luna es accionista”. Hoy, en conferencia matutina el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que las empresas de García Luna, acusado de recibir presuntos sobornos del cártel de Sinaloa a cambio de protección, también ofrecieron servicios de asesoría al gobierno de Peña Nieto.
La UIF continúa el rastreo de movimientos financieros de las empresas relacionadas con García Luna y su esposa, luego de las 11 cuentas bancarias que ya fueron bloqueadas, por lo que hasta este momento no se han especificado las fechas exactas en que se dieron estas operaciones ni los montos de los recursos congelados en el sistema bancario.
El ex secretario, de 51 años, aceptó que lo trasladaran a Nueva York para comparecer por los delitos de conspiración para el narcotráfico y falseo de declaraciones, luego de renunciar a su derecho de audiencia ante el juez David Horan, en la Corte Federal de Dallas.
Con información de Milenio