Amplia repercusión mundial causó el artículo publicado en el medio The Conversation por la profesora de Historia Moderna, Sabine Lee, y la clínica-científica de la Universidad de Queen’s, Susan Bartels, que denuncia la participación de la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (MINUSTAH) en abuso y explotación sexual a mujeres y niñas, con dos relatos que corresponden a niñas de 11 años.
La investigación tuvo lugar durante el 2017 y entrevistaron a aproximadamente 2500 haitianos sobre las experiencias de mujeres y niñas que viven en comunidades que albergan operaciones de apoyo a la paz. De estas experiencias, las investigadoras destacan que 265 contaron historias de “petit MINUSTAH” (niños engendrados por miembros de las misiones de paz).
Dentro de las narraciones se mencionan niñas de apenas 11 años a quienes los militares “impregnaron” y luego “quedaron en la miseria” criando a sus hijos solos porque sus padres son repatriados cuando se conoce el embarazo.
La publicación también revela que “a los menores se les ofreció comida y pequeñas cantidades de dinero en efectivo para tener relaciones sociales con el personal de la ONU, y que la MINUSTAH estaba vinculada a un círculo sexual que operaba en Haití con aparente impunidad”.
Otros relatos cuentan cómo algunas mujeres son abandonadas por los militares cuando se conoce el embarazo y los padres vuelven a sus países. Y esas madres no reciben ningún apoyo para criar a estos niños de parte de sus padres, ni de la ONU, quienes se han negado a las pruebas de ADN que han demandado organismos en Haití.
Las investigadoras resaltan que estos relatos fueron compartidos libremente por los entrevistados, quienes no tenían que referirse a alguna pregunta referente a abusos sexuales, pero que la cantidad (10% de relatos sobre niños engendrados por la “misión de paz”), demuestra lo común de esta explotación sexual por parte de los militares en Haití, quienes se aprovechan de su posición de poder para intercambiar comida por sexo, como consigna la investigación.
«“Te ponían un par de monedas en tus manos para meterte un bebé”»
Los “cascos azules” uruguayos, brasileños, chilenos y argentinos encabezan la lista de países involucrados en embarazos según los relatos de los haitianos.
Con información de La Izquierda