Las autoridades de Colorado cerraron una guardería luego de hallar a 26 infantes mal cuidados por la dueña, escondidos detrás de una pared falsa del inmueble.
Por este motivo, Carla Faith, la dueña de la guardería, fue arrestada y enfrenta cargos criminales, incluido abuso infantil, al igual que otras tres mujeres que trabajaban con ella.
La detención y el cierre del local fueron el resultado de una investigación de seis semanas. A mediados de noviembre, oficiales de Colorado Springs acudieron a la casa-guardería de Faith, de 58 años, tras recibir quejas que aducían que ésta albergaba a demasiados niños, más de los que le permitía su licencia.
La inspección tenía como objetivo comprobar la veracidad de las quejas y controlar el bienestar de los niños que supuestamente cuidaba la ahora encausada en su guardería, nombrada Play Mountain Place.
Al llegar, los oficiales no vieron niños en el lugar ni contaron con la cooperación de la dueña. Sin embargo, escucharon las voces de los infantes y, tras una breve inspección, hallaron una pared falsa dentro del inmueble.
Detrás de ésta, había un sótano en el que estaban dos adultos y 26 niños, todos menores de tres años. Los oficiales afirmaron que encontraron a la mayoría de los niños “sudando, visiblemente deshidratados y con pañales mojados o sucios”.
El incumplimiento por parte de Faith de sus deberes como cuidadora infantil trascendió a la guardería Play Mountain. Poseía cuatro instalaciones de cuidado infantil en Colorado Springs, entre ellas un centro preescolar cerca de su casa, todas las cuales han sido cerradas tras la investigación.
Según el Departamento de Servicios Humanos de Colorado, Faith administraba antes, otros centros de cuidado infantil en California, los que cerraron también por motivos similares.
Una mala cuidadora que finalmente enfrentará responsabilidades civiles y penales, ya que los padres que dejaron a sus hijos bajo su cuidado emprendieron una demanda contra ella por incumplimiento de sus deberes.
Con información de Excélsior