La gata Dimka de la ciudad rusa de Novokuznetsk, tuvo que ser sometida a la amputación de todas sus extremidades, cola y orejas, debido a su congelación. Posteriormente la felina fue trasladada a la ciudad rusa de Novosibirsk donde se le implantaron las prótesis de las patas.
Las nuevas patas para la gata fueron creadas por un equipo científico de TPU mediante una impresora 3D. Las prótesis de titanio fueron revestidas con calcio y fósforo para una mejor inserción y minimizar los riesgos de infecciones. Ya han pasado siete meses de las operaciones, que fueron realizadas en dos etapas. El cuerpo de la gata respondió bien a las nuevas patas y el animal ya puede caminar, correr y superar obstáculos como escaleras.
Anteriormente, en el mismo centro veterinario donde operaron a Dimka se había realizado con éxito una operación similar al gato Rizhi. El proyecto ruso 5-100 tiene por objetivo hacer que al menos cinco universidades rusas figuren entre las 100 mejores del mundo.
Con información de Sputniknews