China implementa un sistema de vigilancia a base de robots en ciudades y aeropuertos para controlar el COVID-19. La epidemia ya se ha cobrado la vida de más de 2.000 personas y tiene en jaque a 75.000 infectados.
El coronavirus continúa en su pico en China, y las autoridades del país optan por poner el cuidado de la salud de la población en manos de la tecnología más avanzada para detener la propagación del virus.
En un vídeo grabado el 19 de febrero se ve un simpático robot que se dedica a patrullar las calles de Shanghái. Su función es medir la temperatura de los transeúntes y recordar a estos que usen mascarillas y se laven las manos con frecuencia.
Robots como el de las imágenes vigilan ciudades y aeropuertos por todo el país emitiendo mensajes informativos sobre precauciones sanitarias y alertando a la Policía cada vez que identifican a alguien que no lleva mascarilla.
Con información de Sputniknews