Atlético de Madrid cumplió con su deber ante Liverpool. Los Colchoneros vencieron 1-0 en un apretado duelo de octavos de final de la Liga de Campeones, para restar un poco de presión cuando deban visitar Anfield con ligera ventaja.
Los actuales campeones de Europa sufrieron el madruguete de Saúl Ñíguez, para quedar con un mal sabor en el mismo escenario en el que se coronaron el año pasado, el estadio Wanda Metropolitano.
Ñíguez anotó a los cuatro minutos y la defensa del Atlético supo resistir los embates de la temida delantera de Liverpool.
La victoria, sin la participación del mexicano Héctor Herrera, deja al equipo del entrenador argentino Diego Cholo Simeone bien perfilado para el choque de vuelta el 11 de marzo en Inglaterra.
En las horas más bajas de la era Simeone, el Atlético se presentó como presa fácil ante un adversario que comanda la Liga Premier con una sideral diferencia. Aunque dominó la posesión a su antojo, Liverpool no supo vulnerar el ordenado bloque defensivo del Atlético.
Los anfitriones apretaron en todo momento y encontraron el gol rápidamente. Ñíguez marcó desde el corazón del área, encontrándose un balón a la deriva tras un tiro de esquina. La pelota rozó en Fabinho, volante de Liverpool, antes de quedar a los pies de Ñíguez para que anotara a placer.
Liverpool, que llevaba 15 juegos sin estar abajo en el marcador, no tardó en enchufarse al partido, pero no fue hasta cumplida la media hora que los visitantes tuvieron una aproximación al arco rival.
La clave fue la insolencia con la que los de Simeone salieron a arriesgarse, muy conscientes de que la visita al estadio Anfield será un tormento. El equipo que comanda Jürgen Klopp y cuyo paso en la liga inglesa es asombroso, se vio rebasado por el orgullo de un conjunto que supo cortar la comunicación de los visitantes.
El Atlético, además, formó un sólido bloque de ataque apoyado por el público rojiblanco, presionó en toda la cancha al Liverpool provocando el cortocircuito en el juego de los Reds, al punto que su estelar trío ofensivo, formado por Roberto Firmino, Mohamed Salah y Sadio Mané, pasó casi desapercibido.
El entrenador de los rojiblancos, Simeone, aseguró que hay noches que no se olvidan, aunque no den un título porque este martes ganaron al “mejor equipo del mundo.
Este equipo tiene registros muy buenos en todas las líneas, jugadores que pueden resolver la jugada en espacios pequeños y el Atlético hizo un gran trabajo como bloque. Empezamos ganando cuando giramos la rotonda con el autobús, y nos encontramos con gente sin miedo, ambiciosa, entusiasmada. A partir de ahí se despertó algo hermoso que tiene el futbol. La gente y el equipo, resumió.
Klopp prefirió mirar hacia el partido de vuelta recordando que “esto no ha acabado.
“Lo hemos intentado al ciento por ciento y lo vamos a intentar también así en el otro partido. He visto caras alegres en el Atlético, pero esto no ha acabado, quedan 90 minutos en Anfield”, dijo Klopp.
“Hemos jugado bien, como queríamos hacerlo, pero creo que en el último tercio de campo nos faltó crear ocasiones claras”, añadió el técnico de los Reds, quien elogió el trabajo defensivo de su rival.
Klopp puso el acento en el ambiente que se vivió en el Metropolitano, con miles de aficionados empujando al Atlético.
“En un partido con este ambiente, tal vez hemos perdido la concentración en algunos momentos, pero hay que pensar que vamos a jugar la segunda parte en nuestra cancha”, dijo.
“El público ha empujado a sus jugadores, nosotros intentamos mantener la calma para tomar las decisiones correctas”, afirmó Klopp antes de advertir: Nuestros aficionados estarán preparados. ¡Bienvenidos a Anfield!
Con información de La Jornada