La mayoría de nosotros, incluyéndote, tenemos malos hábitos que se interponen a lo largo de este camino. Si eres capaz de abandonar los siguientes hábitos, debes ser capaz de entender que el convertirte en millonario no es una idea tan alejada de la realidad como crees. Todos queremos serlo.
Para mí, igual que para muchas otras personas, estos 20 hábitos fueron los que me impedían convertirme en millonario.
Dormir cuando no debes
Si te levantas hasta el mediodía y trabajas 12 o más horas por día para compensar que comenzaste tarde. Aquí está la cosa. Entiendo perfecto, porque luché con eso durante años. No todos somos personas activas por la mañana. Yo, aún me quedo en cama durante las mañanas frescas y lluviosas.
Las personas exitosas son conocidas por despertarse temprano, generalmente antes que todos en su casa, de esta forma pueden empezar desde primera hora a poner en marcha el trabajo, ponerse al día en las noticias, responder correos electrónicos y hacer ejercicio sin sacrificar el tiempo que pasan con su familia.
Descuidar tu salud
“En cuanto a salud, los malos hábitos generan daños perjudiciales”, escribe Thomas Corley en “Change Your Habits, Change Your Life: Strategies that Transformed 177 Average People into Self-Made Millionaires”.
Cuando no estás saludable, estás cansado, menos productivo, más estresado y mucho más propenso a enfermarte. ¿Cómo puedes enfocarte en la construcción de tu salud, si luchas contra esos factores todos los días?
No leer
Las personas con dinero, invierten su tiempo y esfuerzo necesario en ampliar su conocimiento, mantenerse al día con las noticias y tendencias dentro de su industria, aprender de otros y encargarse de seguir innovando.
Como escribió Lipovsky, la lectura trae diferentes perspectivas, te permite obtener varios puntos de vista que a su vez ampliarán el tuyo, dándote el empuje necesario para soñar en grande y motivarte para nunca renunciar.
Depender de una sola fuente de ingresos
Las personas con mucho dinero tienen varias fuentes de ingresos. Lo que significa que para aquellos de nosotros que aspiramos la riqueza, tenemos que invertir parte de nuestros ingresos en pagar nuestras deudas, y reservar para el retiro e invertir.
Esto no significa que tengas que conseguir un segundo trabajo mientras esperas resultados (no es una mala idea hasta que tengas una mejor opción). Podría ser algo que te apasione, como escribir sobre tecnología. Puedes hacerlo a través de un blog y empezar a ganar un ingreso pasivo a través del mercado.
No establecer un presupuesto
Todo el mundo necesita crear un presupuesto y adherirse a él, pero, por desgracia, existen muchas personas que no lo hacen. Puesto que no pueden ver si están gastando más de lo que ganan con exactitud, a menudo les trae problemas financieros. Si notas que este es tu caso, entonces necesitas comenzar a reducir los gastos innecesarios y debes hablar con un asesor para que te reivindique.
De hecho, este es otro hábito descubierto por autores millonarios como: Thomas Stanley y William Danko tras analizar a personas millonarias para su libro The Millionaire Next Door.
No pensar a futuro
“En mi estudio, el noventa y cinco por ciento de las personas de escasos recursos no ahorró y la mayoría de ellos acumuló deudas para subsidiar su calidad de vida. En consecuencia, no tienen dinero ni para el momento de su retiro, ni para la educación de sus hijos, ni para las oportunidades que se presenten”, escribió Tom Corley en “Change Your Habits, Change Your Life”.
Tal como dice Corley. “No ahorrar y gastar más de lo que ganas, genera pobreza a largo plazo sin la esperanza de poder escapar”.
No prestar atención a pequeños gastos
Puedes pensar que gastar $40 al día en una taza de café no tiene ningún efecto en tu monedero. Lo mismo pasa con esa membresía de $500 del gimnasio que casi nunca usas. Pero, a pesar de que en el esquema de las cosas estos son gastos pequeños, aunque no lo creas, se suman rápidamente.
Hace poco revisé de manera aleatoria los pagos realizados con tarjeta de crédito de mi empresa. Descubrí que el 35 por ciento de las personas que compran café al menos 4 veces por semana o que van diario a la cafetería, sólo pagan el mínimo de su tarjeta de crédito mensualmente.
Una vez más, por esta razón es que un presupuesto es tan útil. Te ayuda a administrar estos pequeños gastos para que puedas ajustarte y enfocarte en las cosas importantes. Recuerda sólo mantener las suscripciones que en verdad uses.
Salir con la gente equivocada
Reemplaza a las personas tóxicas y negativas de tu vida por aquellas que son optimistas, que te motivan y te apoyan. “En la vida, sólo conseguirás el éxito si te rodeas de las personas correctas”, dice Corley.
Posponer
Una cosa es decir que quieres convertirte en millonario y otra muy diferente es empezar a hacerlo. Si quieres salir del estancamiento financiero, entonces necesitas tomar medidas tan pronto como sea posible. Si te sientas con un profesional financiero para ajustar tu presupuesto, este sería un gran paso para comenzar a hacer en lugar de hablar.
Beber y apostar
“No hay nada como hacerte rico de manera rápida”; “El éxito financiero toma tiempo, iniciativa y requiere de un esfuerzo implacable”; “Aquellos que apuestan, se engañan al pensar que hay un atajo para alcanzar el éxito”, escribe Corley.
En cambio, los millonarios “crean el hábito de perseguir sus sueños y sus objetivos”.
Por otra parte, el consumo excesivo de alcohol impide que te conviertas en millonario ya que perjudica tu memoria, la capacidad de pensar con claridad y tu salud. Eso no quiere decir que ocasionalmente no puedas beber una copa de vino o una cerveza. No hagas de la bebida un hábito.
Ver demasiada televisión
“La gente rica tiene televisiones pequeñas y bibliotecas grandes. La gente pobre tiene bibliotecas pequeñas y televisores grandes”, dijo una vez Zig Ziglar.
No me malinterpretes. Me gusta ver Netflix de vez en cuando. Pero, como en el descubrimiento de Corley, los ricos prefieren leer, ejercitarse o educarse en lugar de perder el tiempo viendo la televisión. “Hacer uso productivo del tiempo es un sello distintivo de los millonarios”.
“Perder el tiempo es de gente pobre”, dice Corley.
No encontrar un mentor
Estoy seguro de que si hubiera encontrado un mentor años atrás me habría vuelto rico desde entonces. ¿Por qué lo creo? Podría haber aprendido de los éxitos y errores de alguien que se ha desarrollado en esos terrenos, sus consejos podrían haberme ayudado a omitir tantas equivocaciones que he experimentado y en su lugar pude haber obtenido algún beneficio.
En lugar de salir a conseguir un mentor, abre los ojos, están a tu alrededor. Puedes tomar el consejo de un profesor de la universidad o de tus padres.
Permanecer en tu zona de confort
Tomar riesgos y salir de tu zona de confort es inquietante. Lo entiendo. Pero hasta que des ese salto encontrarás el éxito financiero. Este es un hábito que le funcionó muy bien a Bill Gates, Richard Branson, Larry Ellison y Warren Buffet.
“La búsqueda de la riqueza requiere de riesgos, la mayoría de las personas no se lo hacen, por eso no son ricos”, dice Corley.
No hacer preguntas
No lo sabes todo. Por un momento deja de lado tu ego. Odio ser el portador de las malas noticias, pero eso es un hecho y te impedirá ser rico hasta que lo afrontes.
Aprendí de la manera difícil que intentar adivinar el futuro conduce al fracaso y a tomar malas decisiones. Si no estás seguro acerca de alguna inversión o de una idea para tu negocio, no dudes en pedir retroalimentación y asesoramiento.
Ser consumido por el fracaso
Los empresarios portan el fracaso como una insignia de honor. Eso no significa que disfrutan o quieran fallar. Concluir un negocio y perderlo casi todo es una basura, pero esos golpes de la vida son necesarios para llegar a ser tan fuerte como se pueda.
No te confundas. El fracaso es horrible. Pero no debes dejar que eso te detenga. Toma riesgos, y, si fallas, aprende de tus errores y avanza.
No establecer metas diarias
Uno de los mejores hábitos que adopte durante los últimos años fue escribir diario y a primera hora de la mañana mis metas. Esto me inspira y me alienta para lograr mis objetivos.
Descubrí que establecer objetivos diarios, ayuda a priorizar desde los más importantes hasta lo menos importantes. Por ejemplo, en lugar de buscar mis facturas vencidas de $100, me enfoco en una o dos de $1.500. Priorizar significa hacer lo que en verdad importa.
Pensar negativamente
“El éxito a largo plazo sólo es posible cuando se tiene una mentalidad positiva”, escribe Corley.
Estos son algunos ejemplos de los pensamientos negativos más comunes que tenemos y que la mayoría puede superar:
Dudar de ti mismo. La formación, la educación y un mentor pueden cambiar este pensamiento.
Creer que tus objetivos no pueden ser alcanzados. Céntrate en alcanzar tus objetivos diarios y en impulsarte.
Tener malas calificaciones. No. Las calificaciones y la dificultad de aprendizaje no determinan el éxito. Pregúntale a Richard Branson quien superó la dislexia.
La competencia es demasiado dura. Nunca sabrás hasta que lo intentes. Y, ¿en el peor de los casos? Sólo da la vuelta.
Falta de concentración. Una vida saludable y establecer metas diarias pueden mantenerte enfocado.
No ahorrar
“Un trabajo nunca te hará rico. Tampoco ahorrar todo tu dinero en una alcancía. Entonces, ¿cómo construyes la riqueza?”, pregunta Brandon Turner, vicepresidente de crecimiento de BiggerPockets.com.
Entonces, ¿Cómo se logra? A través de bienes materiales como un negocio rentable, una cartera de acciones en crecimiento o invertir en el derecho de bienes raíces.
Recuerda, tu coche y tus juguetitos son responsabilidades que te quitan los ingresos de tu futura riqueza. Enfócate en adquirir cosas que te darán dinero a largo plazo.
Crear excusas
Las excusas fueron uno de los mayores obstáculos entre la riqueza y yo. Crear excusas es fácil cuando estamos tratando de entender por qué tenemos tantas deudas y si no tenemos un ingreso de seis cifras. Decir que queremos “vivir el momento” es una excusa para no trabajar y crear un mejor futuro. Deja de inventar excusas y comienza a trabajar.
Por ejemplo, no te preocupes por ahorrar cuando estás ahogando en deudas. Paga primero, y de esa manera podrás comenzar a ahorrar e invertir. Si no ganas dinero suficiente, busca otra fuente de ingresos como vender cosas en línea o entregar pizzas. Eso no solucionará todos tus problemas, pero al menos es un comienzo para deshacerte de las excusas.
No seguir la Regla 70/30.
Jim Rohn, una de las principales figuras de autoridad en los negocios del condado, tiene una fórmula sencilla para acumular tu riqueza.
“Después de pagar tus impuestos, aprende a vivir con el 70 por ciento de tu ingreso para tus necesidades y lujos”, “es importante ver cómo asignas el 30 por ciento restante después de eso”. Menciona Rohn.
Rohn sugiere dar un tercio a la caridad, un tercio a las inversiones de capital y el último tercio para los ahorros. No notarás nada al principio, pero “deja que pasen cinco años y las diferencias serán notables. 10 años después, serán completamente sólidas”.
Con información de Entrepreneur