Con ocho años de trayectoria, la compañía de Teatro La Gorgona se ha caracterizado por la diversidad de formas de producir y de crear, tanto en los discursos, como en las poéticas y las estéticas, destaca José Uriel García Solís, director de la compañía.
Afirma el dramaturgo que uno de sus aciertos es que constantemente buscan la reflexión y la autocrítica, obligándose a elevar el nivel de su producto escénico y también a ser conscientes y coherentes con el compromiso que tienen con la sociedad. “El hecho de poder observar y poder escuchar, nos sirve para este ejercicio crítico y de investigación, que va encaminado a las poéticas de las jóvenes audiencias”, subraya José Uriel García.
La Gorgona, conformada por creadores escénicos de distintas escuelas de teatro del Estado de México, trabaja con el objetivo de realizar espectáculos de alta calidad. Inició actividades bajo el circuito de teatro comunitario y popular, enfocado a las jóvenes audiencias. En su camino, participó en encuentros y festivales como el Encuentro de Teatro Popular Latinoamericano en Aguascalientes (Entepola); entre otros que se llevan a cabo en el interior del país, ya que consideran que tener acceso a estas plataformas les permite vivir nuevas experiencias y adquirir conocimiento.
El campo de investigación de las obras para jóvenes audiencias es aparentemente inexplorado en Toluca, Estado de México, resalta el director; por ello han trabajado con sus experiencias de vida, a la par que se retroalimentan con intercambios en talleres y diplomados.
La Compañía de Teatro La Gorgona comenzó con Niño de octubre, de Maribel Carrasco, dirigida por Betania Paniagua, como un proyecto escolar y, a partir de esa experiencia, se dieron a la tarea de explorar también obras dirigidas al público infantil y juvenil.
Posteriormente, desarrollaron un proyecto en red, en el estado de Guerrero, ya que Uriel García Solís es originario de dicha entidad. De
esa iniciativa surgió Los Niños Caballero, de Antonio Zúñiga, la cual fue ganadora del Programa Nacional de Teatro Escolar. “Fue una obra escrita por encargo, y habla acerca de las condiciones de vida de los niños en la región de la montaña, las carencias, las tradiciones y las leyendas”, comenta el entrevistado.
La Gorgona ha experimentado diferentes técnicas teatrales y para ello hace uso de títeres, trabajo actoral, música y una propuesta de maquillaje y vestuario atractiva, como el caso de La corte de los bufones, una oferta contemporánea, cuya comedia fue inspirada en textos del precursor del Siglo de Oro del teatro español, Lope de Rueda.
Esta pieza se ha presentado con éxito en festivales como el Festival Internacional de Arte y Cultura Quimera, el Festival de las Almas, además del Encuentro Internacional de Teatro en Tlalmanalco, Estado de México; el tercer festival Cuna de Teatro en Tlaxcala; el Entepola en Aguascalientes. También fue puesta en escena en diferentes países, como Chile, Argentina y en España.
De esta travesía, destaca también Nana, en colaboración con Mini Teatro Landó, una obra de actuación unipersonal creada para el nuevo foro de arte dramático en la ciudad de Toluca.
En 2018, ya como compañía del Estado de México, tuvieron la oportunidad de acceder al Programa Nacional de Teatro Escolar con el proyecto Niñas de la guerra, de Berta Hiriart, con adaptación y dirección de Uriel García Solís. “Es una obra muy interesante porque invita a la reflexión de las consecuencias de la guerra y los distintos tipos de violencia que viven los infantes, además de las familias y la población. Planteando que incluso en nuestros espacios somos vulnerables a la violencia”.
José Uriel señala que en el primer trimestre del año mantuvieron agenda llena con la presentación de las obras anteriormente mencionadas, y actualmente están en espera de generar una investigación que les arroje una nueva producción, para estrenar en próximos meses, además de que muy probablemente tendrán intercambios con el estado de Guerrero en un taller con perspectiva de cultura de paz dirigido a niños.
