La inadecuada regulación del trabajo informal, las recurrentes crisis económicas que han agravado la pobreza y la desigualdad social, así como una baja calificación de la mano de obra en México, entre los más importantes, sentenciarán a un 76 por ciento de los trabajadores a no recibir una pensión en el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), dijo la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
La Ley del Sistema de Ahorro para el Retiro (LSAR) establece claramente que un cuentahabiente del SAR (con cuenta Afore) puede optar por una pensión al cumplir dos requisitos: un número mínimo de mil 250 semanas de cotización (24 años) para el trabajador y, una edad mínima de retiro, que puede ser entre 60 a 64 años (retiro por cesantía en edad avanzada y vejez) y 65 años cumplidos, que es la edad de retiro.
En el estudio: “Dimes y Diretes sobre las Pensiones en México”, la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) afirmó que hay tres grupos ante esta Ley, pero el más preocupante es el tercer grupo, al no poder acumular el número mínimo de semanas cotizadas durante su vida laboral activa al llegar a la edad de retiro.
“Estos trabajadores representan el 76 por ciento de la Generación SAR-IMSS, por lo que se estima que no podrán aspirar a una pensión y solo podrán retirar en una sola exhibición la totalidad de sus ahorros, independientemente del saldo que hayan acumulado en su cuenta individual. A esta situación se le denomina ‘negativa de pensión’. También está el caso de los trabajadores al servicio del Estado (ISSSTE) y representan alrededor de dos millones de cuentas del sistema”, detalló la Consar.
La autoridad precisó que habrá trabajadores (un 7.0 por ciento) que cumplan con los requisitos de la Ley, pero su monto de ahorro será insuficiente para comprar por su cuenta una pensión igual a la pensión mínima garantizada.
“Este grupo podrá realizar retiros programados mensuales de su propio ahorro por el monto de esa pensión hasta que se agoten sus recursos ahorrados en su Afore. A partir de ahí, el gobierno federal les pagará hasta su fallecimiento un monto igual al de la Pensión Mínima Garantizada. Se estima que ellos representan 7 por ciento de la Generación SAR-IMSS”.
En tanto, los trabajadores que cumplen con los requisitos de la LSAR y acumularon un monto de ahorro suficiente a su edad de retiro para comprar con el propio saldo de su cuenta individual una pensión mayor a los que se conoce como Pensión Mínima Garantizada (igual a un salario mínimo de 1997 incrementado por la inflación, de tres mil 199 pesos hasta el año pasado), obtendrán como pensión la cantidad que puedan comprar como renta vitalicia, que es un pago mensual que recibirán hasta su fallecimiento.
Hoy en día, explicó la Consar, el monto de ahorro aproximado para poder aspirar a adquirir una pensión superior a la Pensión Mínima Garantizada es ligeramente superior a 700 mil pesos. Se calcula que estos trabajadores representan 17 por ciento de la denominada Generación Afore.
Dados los problemas estructurales, sobre todo de empleo y desigualdad social, los problemas estructurales del SAR provocan estas malas noticias para los trabajadores mexicanos.
Un elemento importante que podría venir a resarcir un poco esta realidad pensionaria es aumentar la tasa de reemplazo, incrementando la tasa de contribución obligatoria de 6.5 por ciento para los que cotizan en el IMSS a un 15 por ciento.
Según estimaciones de la Consar, el incremento de las contribuciones obligatorias a un 15 por ciento del salario base de cotización, habría incremento significativo en el monto de ahorro del trabajador promedio.
“Su ahorro acumulado pasaría de 648 mil 357 a un millón 131 mil 911 pesos, lo que representa un crecimiento de 74.6 por ciento. Con este monto de ahorro, el trabajador promedio podría aspirar a obtener una pensión de cinco mil 427 pesos, equivalente a un incremento de 41.7 por ciento respecto del escenario base. Su tasa de reemplazo subiría en ocho puntos porcentuales (de 49 a 57 por ciento). Sin lugar a dudas, mayores aportaciones resultarían en una mejora sustantiva en el nivel de vida de los adultos mayores”, prevé la Comisión.
Asimismo, resaltó que la pensión universal fue un buen acierto de la presente administración porque viene a contribuir a aumentar la tasa de reemplezo y aumentar la pensión de los trabajadores.
Con información de El Financiero