La noche de este viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador compartió la tercera parte de la entrevista que le realizó el productor mexicano Epigmenio Ibarra.
En la conversación, el tabasqueño aborda parte de lo que fue la campaña electoral de 2018, cuando visitaba las diversas localidades del país.
López Obrador afirmó que la esperanza del pueblo fortalece y aseguró que su administración hace que esas esperanzas sean una realidad.
“Fortalece (la esperanza), cuando no hay esperanza no hay vida, la esperanza es una fuerza muy poderosa, nosotros despertamos esperanza y estamos haciendo que los sueños, las esperanzas se conviertan en realidad”.
Señaló que en ocasiones se llevan a cabo revoluciones, pero con todo y ello, las personas siguen “penando”.
Añadió que en su caso, se ha buscado el despertar de los ciudadanos y conseguir un cambio en la mentalidad.
“A veces hay revoluciones y la gente sigue penando igual y se puede triunfar por una causa justa, pero no se tiene el acompañamiento del pueblo…En este caso, lo más importante ha sido el despertar de los ciudadanos, la toma de conciencia, el cambio de mentalidad”.
Indicó que pese a las críticas que hay a su gobierno por parte de los medios de comunicación, “no hay problema”; sin embargo, añadió que usará su derecho de réplica a través de las mañaneras.
“Ahora hay derecho de replica y se ejerce y se enojan (los medios) y a veces piensan que es censura. Nosotros no vamos a perseguir a nadie, aunque cualquier medio nos ataque, no hay problema, pero vamos a utilizar nuestro derecho de réplica”, dijo.
Agregó que muchas veces lo que se dice en esos medios son “noticias falsas” o interpretaciones a modo del pensamiento conservador.
Apuntó que no se excluye a los ricos, sino que se trata de incluir a todos con un pacto, en el “que se le dé un trato preferencial a los pobres, a los desposeídos; por eso es por el bien de todos, primero los pobres”.
“Pero esto no significa hacer a un lado a los ricos, yo siempre digo es arriba los de abajo y abajo los privilegios, yo sostengo que se tiene que distribuir la riqueza, por eso no estoy de acuerdo con el contexto de crecimiento o que de esa manera se mida la prosperidad de los pueblos”.
Reiteró que es necesario que la riqueza se distribuya, y rechazó estar de acuerdo con el concepto de crecimiento, pues “pueden haber tasas de crecimiento elevadas, pero se pueden estar acumulando toda esa riqueza en unas cuantas manos”.
En cuanto al caso del combate al crimen organizado, explicó que la estrategia que se lleva es no abandonar al pueblo, a los jóvenes, ya que si no son atendidos, “se los dejamos como ejército de reserva a la delincuencia organizada, los empujamos a eso, a que tomen el camino de las conductas antisociales”.
“Yo creo que ya están teniendo problemas, lo noto porque están desesperados en el reclutamiento y cada vez están enganchando a menores de edad, a más jóvenes todavía, porque ya se les dificulta”.
Mencionó que un millón de jóvenes trabajan como aprendices como parte del programa Jóvenes construyendo el futuro, y consideró un crimen el rechazo a los jóvenes y dejarlos sin la oportunidad de estudiar.
“Lo único que hicieron fue acuñar esa frase chistosa y discriminatoria, de ninis, que ni estudian ni trabajan, pero no hicieron nada por ellos”.
López Obrador explicó que se trata de crear condiciones para vivir con tranquilidad y que no haya la necesidad de caer en las filas de la delincuencia.
Consideró que es un desafío el intentar que los jóvenes no se unan a las organizaciones criminales, pero “es una lucha que tenemos con ellos, es buena lid”.
Confió en que se podrá salir adelante, y además de ello “convenciendo” de que hay otra manera. “Me siento bien, es un desafío, no estoy angustiado, pero vale la pena, no es en vano. Si logramos transformar al país o dejar sentadas las bases, va a ser una buena obra, una contribución de primer orden, y me voy a poder ir tranquilo”, expresó.