Viernes 14 de agosto de 2020. Este domingo 16 de agosto se cumple el centenario natal de Charles Bukowski y para celebrarlo, Anagrama prepara una gala virtual que incluye mesas de debate con especialistas en la obra del escritor estadunidense, así como la difusión de postales.
“La campaña de aniversario se denomina #100AñosDeBukowski y se articula (hasta ahora) por dos charlas, cuya transmisión será el sábado 15 al mediodía en la cuenta de Facebook @AnagramaEditorial, y el martes 18 a las 19 horas en @EventosGandhi, respectivamente”, explica la coordinadora de esa editorial en México, Lluïsa Matarrodona, en entrevista con La Jornada.
“Las referencias de los libreros fueron que Charles era salvaje, marginal y que quebrantaba reglas por naturaleza. Herralde recibió como obsequio los libros Erecciones, eyaculaciones y exhibiciones (1972), y Escritos de un viejo indecente (1969).
“Bukowski –añade– es una figura emblemática para nosotros. Se empezó a publicar en Anagrama desde 1977. El fundador del sello español, Jorge Herralde, visitaba a menudo nuestro país, pero fue en la mítica librería City Lights, en San Francisco, donde le hablaron de él por primera vez.
Jorge decidió publicarlos cuando llegó a Barcelona debido a que poseían dos rasgos esenciales para la editorial: eran textos difíciles de encontrar y elaborados por un entonces novelista desconocido, pero, sobre todo, con mucho potencial.
Los Ángeles y el literato
Henry Charles Bukowski, cuyo nombre de pila era Heinrich Karl Bukowski, nació en Andernach, Alemania, en 1920. Sus padres se trasladaron a Estados Unidos en 1923 tras una crisis económica derivada de la Primera Guerra Mundial. La ciudad de Los Ángeles influenció bastante la narrativa del literato, quien pasó ahí gran parte de su vida.
“Después –prosigue Matarrodona–, se publicaron La máquina de follar (1972), Se busca una mujer (1973), Música de cañerías (1983), Hijo de Satanás (1990) y las novelas: Cartero (1971), Factótum (1975), Mujeres (1978), La senda del perdedor (1982), Hollywood (1989) y Pulp (1994).”
Henry Hank Chinaski fue el personaje ficticio que protagonizó varias obras del prosista. Entre sus características destacan el alcoholismo, la misantropía, la inestabilidad, la violencia y la afición por las mujeres.
“Hay muchísimas similitudes entre Bukowski y su alter ego”, acota la colaboradora de Anagrama en México. Lo más gratificante, recalca, es que para aquellos apasionados de sus letras hemos publicado varios textos inéditos, con lo que mantenemos vivo su legado. Una curiosidad es que cada año aparecen por lo menos dos libros de Bukowski en la lista de los 10 más vendidos por nuestro sello.
Literatura salvaje: 100 años de Bukowski y Centenario del nacimiento de Charles Bukowski son los foros virtuales dedicados al considerado último escritor maldito de la literatura estadunidense.
Carlos Velázquez (Torreón, 1978), participante en la primera actividad junto con Bernardo Esquinca, Mariana Hernández y Ángel Tijerín, considera que los jóvenes tienen que leer a Bukowski para lograr deshacerse de sus prejuicios.
“La literatura de Bukowski te enseña a cuestionar. A hacerte un juicio propio y a no asimilar (sin pensar) todo lo que te dicen en tu casa, en la escuela o en los medios de comunicación. También es una educación sentimental de alturas considerables. Buko te exhorta a leer a los grandes: a Fante, a Heminghway. A escuchar a Mahler. Es un maestro de cómo sobrevivir en las calles.
“Su prosa es tan potente que te deja con ganas de más. Suele decirse que a ciertos autores debemos leerlos durante la juventud. En el caso de Bukowski creo que esto no aplica. Se puede leer a los 17 años o a los 42 y te cautivará.
“He leído toda su narrativa: novelas, poemas, cuentos, diarios. Admiro su faceta de cuentista más que cualquier otra. Bukowski podrá ser todo lo que quieran menos autocomplaciente, porque se metía en la enorme bronca de diseñar problemas y sus consiguientes soluciones.
La preservación de su legado no es algo que competa a nadie excepto a los lectores. Ni siquiera sus herederos pueden garantizar su prevalencia. Pese a los tiempos que vivimos, su obra seguirá gozando de reconocimiento por muchos años más.
Para JM Servín (Ciudad de México, 1962), ponente de la segunda charla junto con Roberto Castillo Udiarte, categorizar a Bukowski de escritor maldito es un término que le queda muy corto.
Es más bien un antípoda de la corrección política. Contrario a lo que se cree, fue un autor incomparable debido a su peculiar visión del mundo, disciplina y amplias lecturas. Un gran satirista del bienestar económico a costa de su integridad.
Con información de La Jornada