Miles de personas participan en la tradicional prueba de natación entre las orillas asiática y europea de Estambul, la única competición de este tipo entre dos continentes.
Si el año pasado se registró una cifra récord de 2 mil 400 participantes, este año fueron sólo mil 765 los que se arrojaron al Bósforo en la orilla asiática para nadar una distancia de 6.5 kilómetros hasta la meta, situada en el lado europeo.
Aunque hubo participantes de 59 países, esta vez la presencia extranjera fue más reducida y la gran mayoría de los nadadores eran turcos, si bien también hubo un importante número de rusos y ucranianos.
La carrera, en la que se puede inscribir cualquiera con licencia de natación o una carta de respaldo de un entrenador profesional, es enormemente popular en Turquía, en parte porque las fuertes corrientes del Bósforo exigen a los nadadores más conocimiento y estrategia que simple fuerza muscular.
Los mejores consiguen recorrer la distancia de 6.5 kilómetros en menos de una hora, con la plusmarca de este año situado en los 46 minutos, alcanzada por el nadador profesional Mustafa Sevenay, informó en su web el Comité Olímpico turco, que organiza la competición.
Entre las mujeres ganó Hilal Zeynep Saraç, con 47 minutos y 52 segundos, una nadadora que el año pasado incluso había batido a todos los hombres con un tiempo de 47 minutos, solo superado aquel año por otra mujer.
Con información de EFE