Radar COVID, la aplicación diseñada y dirigida por la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial del Gobierno, ya está activa en 10 comunidades. Desde este miércoles, Madrid y Navarra se suman a Andalucía, Cantabria, Aragón, Canarias, Castilla y León, Baleares y Murcia, que disponen de este servicio desde finales de agosto.
Disponible para su descarga en las tiendas de Google y Apple, se trata de una app gratuita y anónima. El programa es sencillo en funcionalidades y diseño (utiliza imágenes de licencia gratuita de freepik). No requiere ningún tipo de registro ni verifica mediante la localización dónde se encuentra el usuario.
Al abrir Radar COVID, se da cierta información sobre el funcionamiento de la app, se recuerda su anonimato (si llegase una alerta, tampoco diría cuándo y dónde se produjo el contacto; únicamente que éste tuvo lugar) y se presentan una política de privacidad y unas condiciones de uso que han de ser aceptadas para continuar.
EL BLUETOOTH SIEMPRE CONECTADO
Para que funcione Radar Covid el teléfono debe tener activado el Bluetooth, ya que es el método que utilizará para comunicarse con otros móviles y saber qué personas han estado en contacto. Es posible desactivar el Bluetooth en cualquier momento para pausar el rastreo voluntario. La aplicación asigna a cada teléfono un número aleatorio para poder avisar en caso de contacto.
La única opción además de encender o apagar el radar es comunicar un positivo por Covid-19. Sin embargo, no es posible hacerlo sin un código de diagnóstico, una medida que evita falsos positivos y la saturación de la app por parte de gente curiosa o bromista.
La aplicación utiliza la conexión Bluetooth del terminal, a través de la cual los móviles emiten y observan identificadores anónimos de otros teléfonos que cambian periódicamente. Cuando dos terminales han estado próximos durante 15 minutos o más a dos metros o menos de distancia ambos guardan el identificador anónimo emitido por el otro.
Si se recibiese una alerta, únicamente se nos diría que hemos estado en contacto con una persona que ha dado positivo, pero nunca será identificada ni se conocerá el lugar o la hora en la que estuvimos cerca de esta persona para mantener en todo momento la privacidad.