Sucedió este lunes por la mañana. El nombre del afectado es Salvador Gómez.
La pesadilla de cualquier persona: Pedir un iPhone en línea y que te llegue un jugo Boing. Suena a broma, pero es lo que le sucedió al joven de nombre Salvador Gómez. Aquí su historia.
En entrevista telefónica para el sitio Radio Fórmula, Gómez nos contó que fue el pasado 27 de agosto, cuando él y su esposa realizaron un compra en la página de Sears.
“Era la primera vez que comprábamos ahí. Es más, ni siquiera teníamos la tarjeta de la tienda, pero la solicitamos en línea”, comenzó a relatarnos.
Después de comparar en varios lugares el precio del iPhone SE, se dieron cuenta que en dicha tienda estaba más barato, por lo que decidieron comprar dos equipos; un blanco para su esposa, quien se había quedado sin celular, y uno rojo para él, pues ya le tocaba cambio.
“A la semana de la compra, me metí para ver el estado del pedido y me señalaba que se haría un reembolso por el equipo rojo, pues ya no lo tenían en existencia”, continuó platicándonos Gómez. Tal como le informaron, el dinero de ese equipo se regresó a los pocos días.
“El viernes 4 de septiembre, volvimos a ingresar a nuestra cuenta y leímos que el celular blanco llegaba el lunes”, explicó.
Lunes 7 de septiembre 10:30 horas
Más o menos a esa hora, la empresa de mensajería DHL les entregó una caja de cartón cerrada con los sellos de SEARS, pero al abrir el paquete se percataron que les había llegado un Boing (de guayaba, por si se lo preguntaban).
“Después de ver eso, nos comunicamos de inmediato con SEARS; nos contestaron y les contamos el problema. El joven que nos atendió levantó un reporte y nos pidió que mandemos entre ocho y nueve fotos de la caja con el producto a un correo de devoluciones”, explicó Gómez, quien también hizo la denuncia en Twitter.
Según la respuesta de la tienda departamental, le reembolsarán el dinero de cinco a diez días hábiles.
Con información de Chilangadas