Las autoridades griegas ordenaron el miércoles a miles de personas evacuar una zona cerca de Atenas, donde un gran incendio forestal descontrolado afectó residencias de campo y dañó inmuebles mientras los vientos fuertes impedían los esfuerzos para sofocar las llamas.
No se informó de víctimas del incendio al sureste de la capital cerca de Keratea, el más grave de los 71 incendios que se produjeron en diversas partes de Grecia desde el martes por la noche, según los bomberos.
Se ordenó la evacuación preventiva de las localidades vecinas de Anavyssos y Palia Fokea, así como de pequeños asentamientos en la zona, porque las llamas avanzaban hacia allá. Las autoridades informaron a los pobladores de rutas de escape detalladas.
Los bomberos y las autoridades locales dijeron que no estaba claro cuántas construcciones habían sufrido daños en Keratea. Una humareda densa reducía la visibilidad, pero de inmediato no se informó que hubiera casas destruidas.
Unos 180 bomberos trataban de contener el incendio que arrasaba el bosque, los olivares, la maleza y los viñedos, con ayuda de ocho helicópteros y cinco aviones hidrantes, así como voluntarios locales.
Ardían incendios en las islas de Andros y Thassos y en dos locales del Peloponeso, en el sur, donde se ordenó la evacuación de una aldea. Los bomberos contuvieron un incendio en el balneario marítimo de Nea Makri al este de Atenas y en la isla de Creta.
Los incendios son frecuentes durante el verano griego, caluroso y seco. En 2018, un incendio en Mati, cerca de Nea Makri, causó 102 muertes.