Dejar atrás los veinte exige incorporar cambios que definen tu nueva vida como una verdadera rutina fitness, invertir en tu estilo y comenzar a apostar por la estabilidad.
El cambio de vida a los 30 exige dejar de ser un veinteañero sumido en los excesos puede parecer algo intimidante en un principio pero en realidad es una oportunidad para comenzar a tomar verdaderas decisiones que impactarán tu futuro. Y no, llegar al tercer piso no significa dejar de tener una personalidad divertida sino simplemente reorientar todo eso que suele gustarte para disfrutarlo de otra manera: desde esas salidas con los amigos hasta todo ese estilo que te define.
No será por arte de magia, claro, por lo que repasamos esos aspectos y hábitos que todo hombre debe adoptar a sus 30 para subirse al tercer piso con éxito.
Reemplaza las noches de excesos por encuentros más sofisticados
Por más que intentes aferrarte al recuerdo de los años universitarios y las fiestas maratónicas que formaban parte de ese universo, deberás considerar que a los 30 bien vale cambiar la aproximación de las cosas. No solo porque tu cuerpo ya no aguantará las resacas como solías hacerlo sino porque también la nueva década es una oportunidad perfecta para sofisticar tus gustos: reemplaza las fiestas por cenas con buena comida y un maridaje (de cerveza, alcohol o mezcal) al nivel. Eso hablará no solo de tus gustos sino de una transición a una etapa más responsable.
Llegar a los 30 implica cambiar hábitos de exceso por reuniones más sofisticadas acompañadas de buena comida.
¿Solías ser el veinteañero que comía comida chatarra sin efecto alguno? Te tenemos noticias: en el cambio de vida a los 30 es normal que el metabolismo cambie y tu cuerpo refleje tu edad si no le das el trato adecuado. Dejar los 20 es una buena oportunidad para modificar tus hábitos y comer de forma saludable como parte de un estilo de vida que apueste por una mejor salud a futuro.
Como parte de ello, también es una buena idea comprometerte y desarrollar una rutina de bienestar que contemple alguna forma de entretenimiento. Los resultados no solo se verán en tu físico sino en todos los aspectos de tu vida.
Una buena rutina de ejercicio debe estar incluida en los hábitos de un hombre de 30 años.
Hace tiempo que esto dejó de ser un tabú y el cambio de vida a los 30 implica reconocer que tu piel también sufre estragos, por lo que es momento de anticiparte al paso de los años y desarrollar una rutina que implique cuidar tu apariencia y adelantarse a las señales de envejecimiento. No tiene que ser excesiva, basta con tener un kit de básicos como una buena crema hidratante, algún contorno de ojos y el uso de protector solar. ¿Barba y bigote? Agrega algún aceite natural para su cuidado.
Los 30 exigen incorporar una rutina de cuidado de la piel.
Que en los 20 te hayas visto sujeto a ajusta a tu presupuesto estudiantil y acudir a la peluquería de la colonia no significa que lo tengas que seguir haciendo. Los 30 son la oportunidad perfecta para invertir en un buen corte de cabello y un adecuado cuidado de la barba. Ambos serán cruciales para proyectar una nueva imagen y te ayudarán a sacar el mayor provecho a tu físico. Además, una buena peluquería puede ayudarte a encontrar algún indicio de calvicie y en tal caso, darle el tratamiento adecuado a la situación.
A los 30 es indispensable invertir en una buena barbería.
Sin importar a qué te dediques, Celebrar la llegada de los 30 exige que adquieras un buen conjunto de sastrería: con las medidas precisas y el corte perfecto para tu tipo de cuerpo. Deja de pensar en este tipo de piezas como algo ajeno a tu vida, desde ahora será crucial y más vale que forme parte de tu clóset. Piensa también que la moda ha evolucionado y puedes lucir tan joven como quieras de saco y corbata. Quizás hasta te pueda ayudar a conseguir pareja.
Un traje es una inversión que será necesaria después de los 30.
Por supuesto que pensar en un traje no puede no venir con el calzado que le acompañarán. Pero también debes de pensar en que no todo en la vida son esos sneakers que te acompañaron por toda tu etapa de veinteañero. Un buen clóset debe tener al menos unos zapatos de vestir, otros casuales y sí, un buen par de tenis que permitan transitar de lo casual a lo sport.
Zapatos, una pieza básica de todo hombre con estilo.
Moverte a los 30 es una buena oportunidad para renovar y elevar tu estilo. Puede que hasta ahora, un smartwatch te saque del apuro. Pero llegar a una nueva década es un buen momento para acercarte al mundo de la relojería, que podría incluso convertirse en una inversión a largo plazo y por supuesto hablará de tu buen gusto. EL mercado se ha diversificado tanto que hay opciones que te permitirán añadir una buena pieza sin desestabilizar tu vida financiera.
Con información de GQ