El arzobispo de la archidiócesis de Burgos (España), Fidel Herráez Vegas, ha defendido en una carta enviada al Vaticano que las víctimas de violación luchen “hasta la muerte” para defender su castidad.
La misiva forma parte de la documentación remitida a la Santa Sede para tramitar la beatificación de Marta Obregón, una joven asesinada hace 27 años por un delincuente conocido como el ‘violador del ascensor’, autor también del asesinato de otra mujer y de otras 18 violaciones.
‘Martirio’ y beatificación
Según desveló eldiario.es, el proceso de beatificación se encuentra ahora en una fase en la que, tal como asegura la archidiócesis en su página web, “va a ser preciso afrontar desembolsos significativos inevitables, inherentes a los trámites que conlleva la causa”. Para ello solicitan donaciones en una cuenta bancaria habilitada a tal efecto. “Hasta ahora los gastos han sido menores y hemos podido cubrirlos con nuestros propios medios”, aseguran, indicando que la ayuda de económica de los fieles será a partir de ahora “indispensable” para culminar la beatificación.
El proceso para hacer beata a Marta Obregón se inició en 2011, con el impulso del arzobispo predecesor de Herráez. El pasado mes de febrero acabó la llamada “etapa diocesana” de dicho proceso, con la entrega al canciller de la Congregación para las Causas de los Santos, Giacomo Pappalardo, de 800 folios en los que se intenta demostrar que Marta Obregón fue víctima de martirio. La documentación entregada consta de escritos jurídicos, prueba documental y prueba testimonial, e incluye la polémica carta firmada por Herráez Vegas, con fecha de enero de 2017.
“Marta también es un estímulo para vivir todas las virtudes cristianas que ella fue descubriendo: la alegría, el servicio, la entrega… pero, en especial, la grandeza de la castidad, como se hace visible cuando resiste y lucha hasta morir asesinada por defenderla”, escribe el Arzobispo en su epístola.
El religioso afirma a continuación que la castidad es “una virtud hoy poco valorada, que nos ayuda a orientar el amor y la entrega hacia su plenitud y belleza más singular”, y se refiere a la joven asesinada como “modelo e intercesora de todos nuestros jóvenes”.
Mensaje “tergiversado”
Ante la polémica que ha suscitado el contenido de la carta, la diócesis burgalesa publicó unas declaraciones en las que Herráez Vega aseguraba que su mensaje había sido “tergiversado”, y que no tiene nada que ver con lo que se le atribuye “en lo publicado en algunos medios con tanta y total falsedad”.
“Me solidarizo con todas las personas que son víctimas de todo tipo de violencia y respaldo el trabajo de los grupos que en nuestra sociedad están colaborando por revertir y sanar esta situación”, aseguró el arzobispo en la nota, difundida en la noche de este lunes. En el mismo texto, Herráez Vegas califica de “lamentable” el hecho de que “una mujer tenga que llegar a anteponer incluso su vida por la defensa de su propia integridad”.
Marta Obregón fue asesinada la tarde del 21 de enero de 1992, tras pasar el día estudiando en un centro juvenil de la ciudad de Burgos. Fue abordada por su asesino en el portal de su casa. Su cadáver fue hallado seis días más tarde, cubierto de nieve a las afueras de la ciudad. Presentaba 14 heridas de arma blanca y evidentes muestras de haberse resistido a la agresión.
Con información de RT
