El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que debe investigarse, sin privilegios, a las personas vinculadas al presunto de desvío de recursos públicos en el ámbito científico, a las que definió como un grupo privilegiado del régimen anterior que ahora se dice perseguido.
Subrayó que ni él ni su esposa tienen que ver en el caso; sin embargo, han sido vulgarmente insultados.
Al dar a conocer en la conferencia de prensa matutina parte de un informe que le envió la directora del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez, el mandatario mencionó que el caso se refiere a un grupo de investigadores que formaron un especie de asociación civil que recibían dinero del Conacyt.
Recursos públicos
Enseguida leyó un extracto del citado informe: “‘Entre 2002 y 2018 la asociación civil recibió alrededor de 100 millones de pesos a proyectos de ciencia y tecnología y 471 millones para cubrir gastos de operación entre los que se incluían choferes, celulares, servicios de bocadillos, salarios e impuestos de alrededor de 40 personas, comidas en restaurantes de lujo, viajes al extranjero”.
“‘Asimismo, la asociación civil recibió un inmueble de lujo en el Centro de Coyoacán -por qué no en Iztapalapa, comentó el presidente- con recursos que no justificó ante el Conacyt.”
“Además de que dicha asociación civil fue la instancia responsable de emitir el dictamen en 2097 que justificó las omisiones de las autoridades federales en relación con el rescate de los cuerpos y la ampliación de investigaciones relacionadas con la mina de Pasta de Conchos.”
O sea, comentó por su parte el mandatario, “un grupo predilecto del régimen anterior”.
Entonces, dijo, como ya no se puede mantener estos privilegios, pues ahora se sienten perseguidos.
“Pero yo le pregunto a la gente: el combate a la corrupción, ¿va a ser selectivo? ¿O va a ser parejo? ¿Vamos a excluir a grupos, a potentados, a las élites? Ya sea de la academia, de la ciencia, de la intelectualidad, a las élites económicas, ¿o aplicamos el combate a la corrupción por parejo?”.
—¿Está de acuerdo en que el caso se lleve al ámbito penal?, se le preguntó.
—Que se investigue y si hay corrupción que se castigue. ¿Por qué nada más se va a castigar a los pobres, a los que no tienen para comprar su inocencia? ¿A los que no tienen agarraderas, a los que no son influyentes? ¡No! Tiene que acabarse con la impunidad, sea quien sea.
“Al margen de la ley nada, por encima de la ley, nadie, sean amigos, colegas, familiares, que se entienda.”
Insultos
No sé si sea cierto, comentó, pero uno de los investigadores supuestamente perseguido publicó ayer un mensaje en Twitter.
“Ojalá que lo consigamos, para que vean el nivel moral, porque siempre he dicho que una cosa es la educación y otra la cultura y que los grados académicos no son sinónimo de cultura, se pueden tener altos grados académicos y no tener sensibilidad en lo social ni en lo humano y no poseer valores culturales, morales, espirituales, porque eso fue lo que hizo el neoliberalismo, individualizó, dejó sin dimensión social, humana, la educación, la investigación.“
Leyó, textual, el tuit que “ofende a Beatriz y me ofende a mí, pero de manera vulgar. O sea, ¿qué tenemos que ver nosotros? Pero es producto de todo un proceso de deformaciones que se fueron creando durante el período neoliberal”.
El tuit, si es real, acotó, fue escrito por Aldo Aldrete, del grupo de los acusados: ‘“Comiencen con la puta seudo escritora, seudo investigadora, ¿no saben quién es? La Zopilota; esa idiota que no sabe ni escribir una frase sin faltas de ortografía. Ella no tiene ningún fuero y gracias al pendejo, loco, imbécil, ese al que hoy limpian los zapatos ustedes y Gertz (sic)”.
El presidente López Obrador dijo que siempre “salimos de la calumnia ilesos y tenemos tranquilidad en nuestra conciencia pues lo podemos poner, pero esto es para que entre todos analicemos el grado de descomposición al que nos llevaron con la política de pillaje, de corrupción, en el que lo más importante era triunfar a toda costa, sin escrúpulos morales de ninguna índole”.
“Entonces, cambiar este régimen de privilegios y corrupción pues lleva a todo esto, a insultos, por eso mi discurso del día 16 de septiembre lo dediqué en buena parte a dar a conocer los indultos de la oligarquía contra Hidalgo.”
Artículo de Emilio Gómez/ La Jornada Maya